PÁDEL > I TORNEO ILUSTRE AYUNTAMIENTO DE LA MATANZA

Imponen su ley

JUAN S. SÁNCHEZ | La Matanza

Punto y final. El I Torneo Ilustre Ayuntamiento de La Matanza celebró su última jornada con el triunfo del gaditano Álvaro Cepero y el grancanario Alejandro Reino en el duelo por el título de la Primera Categoría masculina. Cepero y Reino, favoritos tras la baja de Adrián Allemandi y Víctor Sáenz, hicieron valer esa condición en el encuentro decisivo venciendo ante el conejero Javier de Paiz y el malagueño Ernesto Moreno (6/4 y 7/6) en una final muy disputada y que tuvo algunos momentos de brillantez.

Los campeones lo pasaron mal para doblegar a Álvaro Gutiérrez y Sixto Hernández (6/3, 5/7 y 6/4) en las semifinales en las que la pareja tinerfeña estuvo con ventaja de 0/30 cuando el marcador reflejaba igualdad a tres juegos ya dentro del último set. En la final, Cepero y Reino estuvieron sólidos después de romper el servicio de Javier de Paiz en el primer juego del partido. A partir de ahí cimentaron el triunfo en su solvencia al servicio pese a que De Paiz sacó la artillería pesada y Moreno, que entró en el partido un poco tarde, apretó los dientes para enjugar la diferencia en una manga que, definitivamente, se decantó hacia el lado de los favoritos. En el segundo set Moreno y De Paiz estuvieron más regulares y las dos parejas conservaron sus respectivos saques aunque, con Cepero al servicio, en el segundo juego del set, De Paiz y Moreno tuvieron tres bolas para romper el saque que las solventaron el gaditano y Reino con oficio.

El duelo llegó hasta el empate a cuatro juegos cuando Cepero y Reino parecieron dar el golpe definitivo a la final rompiendo el saque de De Paiz y poniéndose 4-5 arriba y servicio del jugador gaditano. Moreno y De Paiz superaron la crisis arrebatándole el juego a los campeones e igualando a cinco el encuentro.

Cepero y Reino volvieron a romper el saque siguiente y luego tuvieron bola de partido, pero dos errores de Reino y otro de Cepero con el grancanario al saque llevaron el duelo a la muerte súbita. Ahí, los favoritos impusieron su ley y acabaron imponiéndose por 7/5.