EFE | San Sebastián de La Gomera
El alcalde del municipio gomero de Valle Gran Rey, Miguel Ángel Hernández, ha informado de que el ayuntamiento adopta medidas para garantizar el suministro de agua potable durante el verano.
En declaraciones a Efe, Miguel Ángel Hernández concretó que se acaba de instalar una nueva tubería que conecta el tanque de El Altito con el barrio de La Calera y se realizan obras de mejora en la red de agua potable en el barrio de La Playa, con el fin de evitar las pérdidas detectadas.
Además, se llevará a cabo otra obra en la red de suministro en el puerto de Vueltas y se acomete un estricto control de contadores, conexiones ilegales y del uso del agua en complejos turísticos.
A su vez, el Ayuntamiento de Valle Gran Rey va a mantener en vigor el bando municipal sobre el uso de agua potable, por el que sólo se puede utilizar para actividades domésticas, se prohíbe el lavado de coches y calles, y se sanciona el riego de terrenos agrícolas.
Asimismo, se estudia la revisión del precio público del agua, para elevarlo a partir de determinada cantidad de consumo pero sin modificar el primer tramo.
“No es un trabajo improvisado sino que lo hemos venido desarrollando durante meses, y lo primero que hicimos fue instalar contadores a fin de saber el caudal de agua que salía del tanque de El Altito, que suministra a la zona baja del valle”, explicó Hernández.
Posteriormente, agregó, se detectaron las zonas donde se producen pérdidas y en estos momentos se está en la fase de acometer mejoras en la red y de sustituir tramos defectuosos por nuevas instalaciones, lo que ha provocado cortes de suministro puntuales.
El alcalde recordó que todas estas medidas se han adoptado no sólo por la sequía que se padece este año y por las perdidas detectadas en la red sino también por el elevado consumo de agua que evidencia el mal uso ciudadano.
Miguel Ángel Hernández puso como ejemplo de este mal uso el hecho de que en la zona baja del valle haya agua suficiente para abastecer a una población de once mil habitantes y “hemos tenido que hacer cortes porque no nos llega”.
Además, el consumo de agua en diciembre (época de máxima ocupación turística) ha sido prácticamente el mismo que en estos momentos, cuando el pueblo está casi vacío.
El alcalde cree que hay que replantearse la “defectuosa” gestión del uso del agua, al considerar que “algo está fallando” dado que La Gomera dispone de pozos y galerías con agua suficiente para abastecer a la población.
“Hemos pasado de un modelo de gestión integral del agua que no tenía nada que envidiar a la de otros países a un momento en el que esa cultura se ha derrumbado, por lo que deberíamos pensar en volver a la gestión de nuestros abuelos”, afirmó.