JOSÉ ANTONIO FELIPE | Santa Cruz de Tenerife

“Podía haber sido peor”. Varios seguidores del Club Deportivo Tenerife desplazados en el día de ayer a Ponferrada no daban por malo el resultado final después de haber vivido unos instantes finales en los que la diferencia pudo ser mayor.

Habían llegado desde todos los puntos de España e incluso del extranjero, como el caso de Andy que viajó desde Bristol, en Inglaterra, para apoyar a los jugadores de Quique Medina. Otros muchos habían tenido que salir de Tenerife, dormir en Gran Canarias, volar hasta Madrid y de allí hasta El Bierzo por carretera. No era sencillo, ni barato, llegar a tierras castellanas, pero lo lograron.

En ambiente con los seguidores locales fue de total camaradería, dejando a un lado, por momentos, la supuesta trama que invitaba a Orlando Quintana a facilitar la clasificación de los blanquiazules. Es curioso, pero Quique Pina, que parecía estar envuelto en un halo de sospecha en todo momento, tuvo que ver ayer como Cádiz y Tenerife, los que algunos dicen que son dos de los clubes en los que tiene intereses, caían derrotados. Mal negocia para Pina.

El dudoso penalti cometido en el área del Tenerife se vivió a escasos metros del lugar ocupado por los seguidores del Tenerife. El gol de Yuri, más aún porque Sergio Aragoneses llegó a rozas el balón, cayó como un jarro de agua fría

Más aún lo dejó el planteamiento, los balonos dirían que algo rácano, de un Quique Medina que tuvo que volver a sufrir desde la grada con su equipo.

Caras largas, lamentos y más lluvia al final del encuentro, mientras cada uno iba a su choche o su guagua para poner rumbo a Tenerife. Los más afortunados llegaron bien entrada la noche. Otros, los más sufridores, lo harán en la tarde de hoy creyendo, porque es así, que en el Heliodoro habrá remontada.