D. N. M. – B. A. | Santa Cruz de Tenerife

El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, se impuso ayer a la alternativa renovadora del presidente del grupo parlamentario regional, José Miguel Ruano, el alcalde de La Laguna, Fernando Clavijo, el presidente del Cabildo tinerfeño, Ricardo Melchior, y el alcalde de Puerto del Rosario, Marcial Morales. Pero además el presidente del Parlamento y de CC de La Palma, Antonio Castro, fracasó en su intento de consensuar una estructura orgánica distinta a la presentada por una ponencia, que deja a la presidencia como una figura representativa y crea un nuevo cargo, la secretaría general, a la que se le otorga todo el poder ejecutivo.

Una primera victoria de Paulino Rivero que se confirmará hoy en la votación de la candidatura a la dirección nacional dominada por el jefe del Ejecutivo y el portavoz del Parlamento y presidente de la organización de Fuerteventura, José Miguel Barragán.

La sesión vespertina del cónclave estuvo centrada en la discusión de las tres ponencias y enmiendas presentadas, la ideológica, la política y la de estructura. Sin embargo, todas las miradas e intereses se centraron en los trabajos desarrollados en la nueva estructura diseñada por el exconsejero regional de Sanidad de la organización de Gran Canaria, Isaac Godoy.

Tras más de cuatro horas de debates y votaciones a puerta cerrada, Antonio Castro abandonaba la ponencia visiblemente nervioso y contrariado. El presidente de La Palma informó que había intentando consensuar cuatro enmiendas procedentes de La Palma y Lanzarote, que proponían una estructura distinta basada, principalmente, en una presidencia y varias presidencias ejecutivas.

Castro explicó que la presidenta de la mesa de la ponencia, Sulbey González, rechazó esta petición. Una decisión que el líder palmero entendió que se trataba de una interpertación interesada del reglamento porque la votación separada de las cuatro enmiendas no modificaba nada la propuesta de Godoy.

Es lo que ocurrió finalmente. La ponencia por 152 votos a favor de Gran Canaria, la corriente de Tenerife que apoya a Rivero además de una parte importante de Fuerteventura y Lanzarote aprobaron la ponencia de Godoy. Los votos contrarios fueron 80 y las abstenciones sumaron 30 papeletas procedentes de los jóvenes, principalmente.

El plenario votará hoy, a primera hora, la ponencia de la estructura. A continuación se abrirá el plazo para la presentación de las candidaturas a la dirección nacional.

Al cierre de esta edición, a última hora de la noche de ayer, cabía la posibilidad de que se dieran dos listas. Una, la liderada por el presidente del Gobierno de Canarias y José Miguel Barragán. La segunda es la alternativa de José Miguel Ruano y Marcial Morales. Sin embargo persistían las dudas después de la primera derrota sufrida en los trabajos de la ponencia.

Con estos antecedentes se pone en evidencia que Rivero vuelve a coger las riendas del partido después de que, en el congreso de 2008, fuera vencido por la unión de La Palma, Gran Canaria, Fuerteventura y El Hierro que, en esta ocasión, no acudió a este cónclave.

Una derrota que el jefe del Ejecutivo trató de solventar, durante estos años, a través del poder del gobierno. Una acción duramente criticada por el partido tras las últimas derrotas electorales.

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El presidente hace hincapié en la pérdida de influencia

El presidente del Gobierno de Canarias,Paulino Rivero, presentó a los 880 compromisarios acreditados un balance de su primer año de gestión en su segunda legislatura.

Rivero afirmó que el crecimiento del 2,1% del Producto Interior Bruto y el resto de los datos positivos con los que se cerró 2011, según dijo, se debieron a los “acuerdos” suscritos con el PSOE de José Luis Rodríguez Zapatero.

Pero tras la victoria del PP en los comicios generales del pasado mes de noviembre, Coalición Canaria, por primera vez en 18 años, continuó, “ha perdido peso político y capacidad de influencia”.

Una situación que, según el jefe del jefe Ejecutivo, ha posibilitado el “maltrato” que el Gobierno de Mariano Rajoy infringe a la Comunidad Autónoma.

En su opinión, en CC “no hemos logrado hacer entender” a la sociedad de las Islas que “si tenemos influencia en Madrid” se dan situaciones como la actual.

Rivero instó a los compromisarios a afrontar el reto de crear una “mayoría social comprometida” en la defensa de los intereses de la Comunidad Autónoma. Para ahondar en esta teoría puso como ejemplo a Cataluña y su reclamación de pacto fiscal.

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