Nos van a subir el IVA del 8 al 18, o tal vez más en el sector turístico; también lo harán con las tasas aeroportuarias en el 50% o más. Solo se me ocurre parafrasear a Romanones: “ Al suelo que vienen los nuestros”. Adiós Plan Integral del Turismo, adiós empleo. Por primera vez estoy convencido de que “los adversarios están frente al banco azul, y los enemigos se sientan a nuestro lado”. El país está fundido y estos políticos que legítimamente están en el poder, porque las urnas hablaron en ese momento, llevan a la mayor industria de España a la quiebra absoluta. Churchill dijo que un político se convierte en estadista cuando comienza a pensar en las próximas generaciones y no en las próximas elecciones. Me pregunto cómo lo hará el empresario que primero, como es lógico, paga a sus empleados cada mes, luego debe pagar a la Hacienda pública y a la Seguridad Social y proveedores, pero su problema o dilema es que no puede ya pagar a todos. La subida del IVA será la muerte de muchas empresas, y la subida de AENA será la continuación para que nos quedemos con poco transporte aéreo y caro. No se dan cuenta de que el futuro está oculto detrás de los hombres que lo hacen. La libertad que tenemos no es otra cosa que la capacidad del hombre para tener una mano en su propio desarrollo, pero no nos dejan.

Nuestros políticos no tienen razón porque, cuando uno está en posesión de la razón, puede cometer errores, pero nunca los cometerá a conciencia, y lo que se quiere hacer con el turismo en España es cometer un error a conciencia, cuyo resultado afectará a miles de personas. Y si los sindicatos quieren persuadir a algo o a alguien, deben apelar más al interés común que al intelecto.