EUROPA PRESS | Barcelona

El FC Barcelona ha hecho oficial este miércoles que ha llegado a un acuerdo con Francesc ‘Tito’ Vilanova para que el hasta ahora segundo entrenador de Pep Guardiola coja su relevo para las dos próximas temporadas, hasta 2014, a partir de este mismo viernes cuando firme su nuevo contrato y sea presentado.

A diferencia de Guardiola, Vilanova ha apostado por un contrato de dos temporadas, y no de una con opción a otra como también se había barajado, para estrenarse como nuevo inquilino del banquillo blaugrana.

Tras días de negociación entre su representante, Josep Maria Orobitg, y el club se ha hecho ya oficial el acuerdo para el nuevo contrato con una mejora económica para el de Bellcaire d’Empordà, que será presentado este mismo viernes a las 13.00 horas en la Sala París.

Previamente, a las 12.00 horas y en las oficinas del club, concretamente en el despacho del presidente, Sandro Rosell, tendrá lugar la firma del contrato –hasta el 30 de junio de 2014– y, media hora más tarde, se hará la foto oficial en la puerta junto al escudo y bandera del club y la ‘senyera’ catalana.

En la rueda de prensa, además de Rosell y de Vilanova, estará presente el director deportivo del club, Andoni Zubizarreta, quien esta semana también ha prolongado su contrato hasta 2014 y que ha sido uno de los artífices de que Vilanova sea el nuevo primer entrenador blaugrana, con el gran reto de hacer olvidar a su amigo y ya exentrenador Pep Guardiola.

Tito Vilanova, la sombra de Guardiola para perpetuar el modelo

El nuevo entrenador del FC Barcelona, Francesc ‘Tito’ Vilanova, asume en solitario desde este viernes, cuando será presentado oficialmente a las 13.00 horas en la Sala París, el reto mayúsculo de perpetuar la gloria en el Barça más exitoso de la historia, un equipo que él mismo ayudó a forjar con un papel clave a la sombra del ya extécnico Pep Guardiola.

En la rueda de prensa en la que se anunció el adiós de Guardiola, el presidente, Sandro Rosell, sorprendió al anunciar súbitamente el nombre del nuevo técnico, que garantiza la continuidad del modelo y, a su vez, un porcentaje de aire fresco tras cuatro años de éxitos.

Tito Vilanova, a quien José Mourinho ya no podrá ignorar llamándole ‘Pito’ como hizo el pasado verano tras meterle el dedo en el ojo durante la Supercopa de España, conoció a Guardiola en los años ochenta, cuando ambos soñaban con llegar a lo más alto en el mundo del fútbol.

Guardiola sí alcanzó las cotas más altas capitaneando al club blaugrana y llegando a la selección española, pero su amigo se tuvo que conformar con una carrera más discreta que le llevó a militar en Figueres, Celta, Badajoz, Mallorca, Lleida, Elche o Gramanet hasta su retirada hace diez años.

Cuando el de Santpedor recibió el ofrecimiento de entrenar al filial hace cinco años, se acordó de su excompañero en la cantera, que ya había entrenador en las categorías inferiores del Barça, puliendo a promesas que ahora militan en el primer equipo como Leo Messi, Gerard Piqué o Cesc Fàbregas.

Entre ambos entrenadores lograron el ascenso en Tercera División del Barça B y, cuando Joan Laporta recurrió a Guardiola para rearmar el derrumbado equipo de Frank Rijkaard, el de Santpedor no dudó en llevarse consigo a Vilanova. Pocos podían imaginar que se abría la época más exitosa en la historia del club, con catorce títulos ganados de diecinueve posibles.

Guardiola reconoció que en otoño ya intuía que éste sería su último año al frente del Barça y quizá ayudó a declinar la balanza el estado de salud de Vilanova, que en noviembre fue operado con éxito de un tumor en la glándula parótida. Tras pasar aquel percance, Vilanova se recuperó y ahora, con toda la confianza del club, parece imbuido de esa energía que Guardiola aseguró no sentir.