ROMÁN DELGADO | Santa Cruz de Tenerife

Canarias, a través de su Gobierno autonómico, acaba de hacer lo antes nunca visto en 20 años de historia del Régimen Específico de Abastecimiento (REA), el sistema comunitario de ayudas a la importación de productos alimentarios de consumo directo y de materias primas que se puso en marcha en 1992, en el mismo momento en que Canarias dio sus primeros pasos tras la integración plena en la Unión Europea (UE).

En el día de ayer, el Consejo de Gobierno, como se barruntaba en jornadas precedentes, cogió la sartén por el mango y decidió aceptar el criterio de las organizaciones agrarias (COAG-Canarias, Asaga y UPA) y de otras entidades vinculadas al sector primario local (en parte por la presión ejercida por los cabildos, con decisión a favor de la Fecai, y por el Parlamento, por iniciativa de Nueva Canarias, entre otras instituciones públicas) para formalizar ante Bruselas una petición relevante e histórica sobre el modelo REA.

Y es que el Ejecutivo canario, como se confirmó en la rueda de prensa posterior a la reunión del Gobierno, esta vez celebrada en Santa Cruz, había decidido trasladar a la Comisión Europea un nuevo plan con balances de aprovisionamiento del REA (los artículos que reciben ayudas a la importación) que rebajaba la subficha total anual de ese programa (hoy en 68,4 millones por año) dentro del Posei en seis millones (el sector productor local llegó a pedir algo más de siete); que reducía determinadas ayudas sólo para algunos productos de consumo directo en hasta el 15% (a partir de los niveles hoy vigentes), tal y como había recomendado en informes oficiales el propio Ejecutivo comunitario; que dotaba la subficha destinada a medidas de apoyo a la producción local dentro del Posei con aquellos seis millones, aportación nueva y aplaudida con fervor por los agricultores y ganaderos de las Islas, y que aumentaba la ayuda por tonelada para los balances de aprovisionamiento destinados a la alimentación de ganado (consumo directo y transformación en piensos) de los 72 euros por tonelada actuales a los 82.

Con la medida adoptada ayer por el Consejo de Gobierno, que ahora debe ser ratificada por la Comisión Europea antes de su aplicación a partir del 1 de enero de 2013, se logra un hito en el funcionamiento del REA, pues se puede decir que ésta es la primera victoria lograda por los productores agrarios locales en su guerra por buscar un equilibrio exquisito entre el apoyo que la UE destina a la importación de productos alimentarios y el que concede a la oferta propia del Archipiélago, para así evitar “competencias desleales”.

La crisis jugó a favor

Una de las claves del acuerdo de Gobierno de ayer tiene que ver con el hecho de que Canarias no pudo aportar un euro (el Estado sí lo hizo) en su dotación comprometida para el llamado Posei ampliado (el de las ayudas de Estado), lo que condujo a que las medidas de este con cargo a 2010, las últimas abonadas, se tuvieran que prorratear y así aminorar pagos en el 30%. A esta cuestión se une que este mismo apoyo no cuenta con fondos para pagarlo en 2011: ni del Estado ni de la Comunidad Autónoma. Ahora al menos hay seis millones más, aunque del REA. Los importadores están que trinan.

El chico ganó…

Organizaciones agrarias. Son las artífices del logro: las que plantearon la solución y las que buscaron el respaldo de las instituciones. Aplausos especiales para COAG y Asaga.

Con Fecai y Parlamento. El pleno de la Fecai apoyó las tesis de las organizaciones agrarias y el Parlamento aprobó por unanimidad una PNL defendida por Nueva Canarias.

Y luego Agricultura. Con lo anterior caminado, fue sencillo que Agricultura y Economía se pusieran de acuerdo y lo vieran claro. Y luego llegó el Consejo.