ETA está haciendo inventario de los zulos, pero no agrupando el material para entregarlo, según la Policía

EUROPA PRESS | Madrid

La banda terrorista está haciendo inventario de las armas, así como del material explosivo que guarda en zulos que tiene principalmente en el País Vasco francés, pero no está reuniendo “el material en condiciones seguras y estables”, como dice en el comunicado hecho público hoy, y mucho menos con la intención de entregarlo, según fuentes de la lucha antiterrorista consultadas por Europa Press.

Las citadas fuentes, tras analizar el comunicado distribuido por la banda terrorista, consideran que esa referencia se debe interpretar únicamente como una queja por las últimas detenciones, en especial el arresto hace dos semanas en Albi (Francia) de Ugaitz Errazquín Tellería y José Javier Osés Carrasco, ambos encuadrados en el aparato logístico de la banda y por lo tanto responsables, entre otras labores, del mantenimiento de los zulos.

Otro de los aspectos del comunicados que llama la atención de los especialistas es que en el mismo se diga que las operaciones de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad “están provocando situaciones de alto riesgo”, terminología con la que tratan de hacer responsable a la Policía en el caso de que pueda producirse algún incidente, ya que los etarras siguen estando armados, como ocurrió con el caso de los citados anteriormente.

Asimismo, las fuentes citadas consideran que el objetivo fundamental de la banda con el comunicado es intentar meter presión al Gobierno, al PNV y al PSOE. Mientras que al primero, le acusa de manejar junto con Francia una “agenda contra la paz”, a los socialistas les reprocha que están desvirtuando las claves de la soluciones en asuntos como los presos o el diálogo con ETA. También critica al PNV que sea comprensivo con el Gobierno y que dedique sus críticas más incisivas a la izquierda abertzale.

Un último asunto que ha llamado la atención de los expertos en la lucha antiterrorista es el final del comunicado, donde se citan cinco puntos. Las fuentes citadas consideran que el número de puntos es una alusión a la agenda secreta y a la hoja de ruta que la banda terrorista podría haber negociado con el anterior Gobierno a través de intermediarios, sobre los pasos que el Estado pensaba dar una vez que ETA anunciara el cese definitivo de su actividad terrorista.