MARÍA FRESNO | Santa Cruz de Tenerife
Los abusos de Hacienda ya tienen un vigilante: la asociación Dávide (www.davide.es). Esta organización nació hace justo un año con el firme propósito de defender al contribuyente. José Alfonso García, asesor fiscal con más de 25 años de experiencia, es quien tomó la iniciativa, junto con otros compañeros, y tras un año de vida, los resultados hablan por sí solos.
“Hacienda es el brazo armado del Gobierno y su única misión es recaudar, es más, los funcionarios cobran extras. Cuanto más recauden, mayor será la comisión”, asegura en declaraciones a este periódico.
Por ello, explica que era el momento de que alguien hiciera frente a este organismo. La orden de intensificar la recaudación, por parte de la administración estatal, regional, e incluso local, ha dejado a muchos contribuyentes “absolutamente desvalidos” ante Hacienda, y la única forma de “combatir” esta situación es haciéndolo público. De ahí nuestra asociación”, precisó.
El 99% de los clientes de Dávide son ciudadanos . “Se dirigen a nosotros, normalmente a través de las redes sociales, y nos cuentan su caso. Tras estudiar la documentación y comprobar que existe abuso por parte de la administración, comenzamos a actuar”, explicó García, “porque una cosa es que un contribuyente se sienta atropellado, y otra que el acto que denuncie sea un atropello”. Una vez analizada toda la documentación, la asociación prepara la queja y la presenta ante la administración correspondiente, y ahí es donde empiezan los “problemas”. “Hay algunas que nos atienden bien, y otras que no hacen ni caso, y de ahí la necesidad de contar con Dávide”.
Los ‘extras’
García está convencido de que, con la situación de crisis actual, la misión de la administración tributaria, “más que nunca, es la de recaudar”, y lo hace, además, “sabiendo que el que recauda tiene una comisión -aunque no ocurre en todas las administraciones tributarias”. “Y es ahí -prosigue García- donde está lo perverso de este sistema. Imagina que a ti te digan ‘por cada palabra que escribas, te pago tanto’, pues aquí es lo mismo, por cada euro recaudado de más, te pagamos tanto”, explicó.
El principal objetivo de Hacienda es que se cumpla la Ley y no se defraude, pero si se crea un estímulo, lo que se hace es “pervertir” este mecanismo. Además, García asegura que muchos de los funcionarios de la inspección de Hacienda estatal, cuando se sientan a negociar con el empresario, ya tienen previsto un plan de actuación con el importe a recaudar.
Para José Alfonso García, los mayores “abusos” se producen cuando se hace una interpretación “imaginativa” de la norma, y mencionó como una práctica, “muy habitual, entre otras”, la de los funcionarios de Hacienda que se presentan en la empresa pidiendo los libros. “Esto no se puede hacer sin autorización judicial”, explicó, “y hay muchos empresarios que no lo saben”.
Dávide se constituyó sin ánimo de lucro, y tiene carácter nacional. Precisamente, en este momento, lleva asuntos a contribuyentes de Valladolid, Granada y Cáceres, aunque la mayor parte de los demandantes de sus servicios son de la Comunidad Autónoma de Canarias. En estos momentos tramita más de 100 asuntos, en palabras del Diputado del Común en 2010, el 25% de todas la quejas en materia tributaria pertenecen a la asociación.
[apunte]“Si para dirigirte a tu administración tienes que tener valor, es que algo funciona mal”
José Alfonso García lo tiene claro. El sistema no es malo, pero el “mecanismo” que se emplea para recaudar es “perverso”, y la prueba de ello es que, actualmente, un contribuyente tiene que tener “valor” para dirigirse a la administración, con lo cual, “es obvio que algo está funcionando mal”.
“Es inconcebible que para dirigirte a tu administración a reivindicar tus derechos necesites valor”, insistió. Es por todo esto que “creamos la asociación”, señaló García, es ya una cuestión de “principios, porque hay cosas que valen más que el dinero”, afirmó.
“El que haya defraudado que lo pague, pero el que haya cumplido la ley, no tiene porqué atenerse a este sistema abusivo”, puntualizó.
Otro de los motivos de la constitución de esta asociación es la “ineficacia” de los organismos públicos creados para la defensa del contribuyente. El Diputado del Común, señala García, es uno de ellos. “Se trata de una institución casi decorativa”, aseguró, “no pinta nada”. “O se cambia la ley para darle más autoridad, o se quita”, indicó. Lo mismo ocurre con el consejo para la defensa del contribuyente, que es estatal, pero que, sinceramente, “no funciona porque son primos hermanos y cuesta mucho que salga adelante alguna resolución”, detalló.[/apunte]