EUROPA PRESS | Barcelona
La Federación Catalana de Fútbol (FCF) ha decidido suspender finalmente la primera edición de la Supercopa de Catalunya, en un acto que lamentan “profundamente”, ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo con FC Barcelona y RCD Espanyol para encontrar una fecha adecuada.
En un comunicado, la federación catalana ha detallado el proceso desde la primera reunión hasta los últimos hechos, y ha lamentado que finalmente el fútbol modesto catalán no pueda recibir los beneficios e ingresos derivados de la Supercopa de Catalunya, pues la finalidad del trofeo era esta.
Después de que el FC Barcelona anunciara el pasado viernes que enviaría al filial a jugar el partido, la FCF suspendió el encuentro –fijado para este mismo martes– y emplazó a clubes, entidades y prensa al lunes para una reunión y comparecencia ante los medios en la que se anunció un plazo de 48 horas a Barça y Espanyol para aceptar o no la nueva fecha propuesta, para el 26 de septiembre.
La tarde del lunes el FC Barcelona aseguró que aceptaba la propuesta y que llevaría al mejor equipo posible, aunque en esta segunda ocasión ha sido el Espanyol quien no ha aceptado la fecha al asegurar que no les iba bien ni a nivel deportivo ni institucional, además de mostrar su malestar hacia la FCF y la Generalitat por no hablar claro sobre el origen del problema y de la suspensión del partido.