GABRIELA GULESSERIAN | La Orotava

El pleno municipal de La Orotava conoció ayer el reclamo de 300.000 euros de la Seguridad Social al Ayuntamiento por cotizaciones no abonadas de la cooperativa Mararía, responsable hasta el momento del servicio de ayuda a domicilio. La misma situación que se dio hace más de un mes en el consistorio capitalino por el mismo motivo y que llevó, incluso, al retraso en el pago de las nóminas a los trabajadores.

Debido a ello, el pleno orotavense tuvo que posponer la nueva adjudicación del servicio a la empresa Clese, SA, ya que Mararía continuará haciéndose cargo del mismo “hasta que la deuda se extinga”, confirmó la concejal de Bienestar Social, Belén González. “Me siento engañada porque la semana pasada tuve una reunión con sus responsables y me dijeron que eran dos centros de trabajo diferentes y, por lo tanto, el problema no iba a afectar al servicio a La Orotava, pero la Seguridad Social nos dice que no es así”, declaró la edil.

El consistorio villero se encuentra al corriente del pago con Mararía. El servicio se sigue prestando “pero no se están dando altas nuevas porque eso supondría una modificación en el personal”, apuntó González, quien añadió, por si fuera poco, que la cooperativa también le reclama al Ayuntamiento el IGIC desde el año 2006 pese a que éste se acogió al pago a proveedores.

En otro orden de cosas, el Pleno aprobó una moción del PSC-PSOE mediante la cual se solicita a la Consejería de Educación para que se instale en el municipio la sede del Centro de Educación de Personas Adultas (CEPA) que actualmente se ubica en la Universidad Popular Francisco Afonso de Puerto de la Cruz pero que debe abandonar las instalaciones en el próximo curso.