[apunte]Zonas de alta densidad. Los autores del PGO entienden que es vital la liberación de espacio para uso público. Por eso es necesario variar las alturas para conseguirlo. Aunque admiten que su visión de ciudad sería mucho más vertical, entienden que aún no hay instrumentos para hacerlo. / M.P.[/apunte]

NATALIA TORRES | Santa Cruz de Tenerife

La ciudad está viva, es libre e independiente. Esta simple premisa es, precisamente, la principal dificultad a la que se enfrenta cualquier planeamiento urbanístico porque, por mucho que se quiera recoger al detalle todo lo que en ella se desarrolla, resulta imposible porque la realidad se desarrolla más rápidamente que los instrumentos urbanísticos. El Plan General de Ordenación (PGO) de Santa Cruz lleva más de diez años de trámites y esta semana es posible que su aprobación parcial vea la luz. Un documento que, más allá de la polémica que lo envuelve, pretende, como explican sus redactores, que ese movimiento natural de la ciudad esté enmarcado en unos cauces concretos, siempre sin perder de vista que “lo fundamental que tiene que regular un Plan es la relación de los ciudadanos con el espacio público”, señala Juan Manuel Palerm, uno de los redactores del PGO. “El puerto, los sistemas de negocio, la universidad, los grandes parques, las carreteras, las plazas, la dimensión pública es el aspecto fundamental de un plan. La visión particular también forma parte, pero tiene su propia regulación y el documento debe estar atento a todo eso y tener flexibilidad para su desarrollo”.

[apunte]Barrio de La Salud. Una ciudad que creció en sentido ascendente hacia la montaña dio lugar a que barrios como el de La Salud estén desconectados de los que están a su alrededor en paralelo. La creación de vías transversales que propone el PGO permite interconectarlo con toda la ciudad. / F.P.[/apunte]

Actividad económica

El primero de los puntos que analizan los autores del PGO tiene que ver con la reactivación económica de la ciudad, que los redactores vinculan de manera directa con la Zona de Actividades Logísticas (ZAL). “Santa Cruz ha perdido actividad económica de una forma tremenda en los últimos 20 años”, señala el arquitecto Leopoldo Tabares de Nava, quien expone que “para reactivar la economía hacía falta delimitar parcelas en donde se pudiera no solamente introducir residencia, sino también otras actividades, y la ZAL es un espacio a desarrollar que tiene varias facetas”. Un espacio en el que se concentre la distribución de mercancías, que sirva para la instalación de grandes almacenes (los del propio puerto de Santa Cruz) y a donde se puedan trasladar en el futuro los grandes mercados de abastos existentes dentro de la ciudad. Para eso se necesitan parcelas grandes. “Necesitamos metros cuadrados y para lograrlos es el Ayuntamiento el que tiene que gestionar el suelo, abaratando su coste, comprando ahora e impidiendo la especulación. Y eso es Plan General”.

[apunte]La conexión con el entorno. La TF-5 es una de las arterias principales en torno a las que se desarrolló Santa Cruz. Los redactores plantean instrumentos para que los ciudadanos se puedan mover en torno a ella, conectando Santa Cruz y La Laguna a través de vías que no obliguen a tener que coger la autopista. / F.P.[/apunte]

Además, señalan, la ciudad debe ser competitiva y para eso necesitan que el puerto también lo sea: “Un puerto no son solo los primeros 10 o 15 metros en los que se asienta. Nosotros queremos competir a través del puerto, darle mayor capacidad, que los almacenes portuarios no estén en el puerto, sino que los grandes camiones que solo quieren recoger suministro no tengan que ir al espacio portuario sino a sitios localizados en los que surtirse. Por tanto, lo que plantea el PGO para conseguirlo son superficies y carreteras”.

Otro de los puntos vitales para la reactivación es Hoya Fría. “Tenemos un suelo ahí que si se dedica solo a viviendas cometeríamos un nuevo error”. La propuesta de los redactores es la nueva ciudad sanitaria. “Es un centro sanitario moderno, un espacio en el que esté todo integrado y que ahí no solo existan actividades sanitarias, sino también otras como hoteles, cafeterías, zonas de ocio e, incluso, de docencia. Son 200.000 metros cuadrados destinados a eso”, explica Palerm. En este punto aclara que “nosotros no queremos decir que dentro de 20 años esta idea sea la misma, pero para que ese suelo no tenga un uso privativo para el ciudadano, es necesario gestionarlo ahora”.

[apunte]Relación puerto-ciudad. El Plan General establece como uno de sus puntos básicos que la ciudad debe hacer al puerto competitivo y recuperar además los espacios que éste no optimice como, por ejemplo, el dedicado a los contenedores, recuperando visión al mar. / DA[/apunte]

Puerto

Esta misma semana se conocía que el Plan Especial del puerto quedaba archivado por una falta de entendimiento entre el Ayuntamiento y la Autoridad Portuaria. Precisamente, esa incomunicación es abordada por los redactores en el PGO, recordando que “desde el punto de vista urbano, el puerto ya no ofrece una relación solo económica, sino formal entre ciudad y el mar”. Para ello, afirman, “el espacio portuario tiene que tener un marco de referencia con respecto a la ciudad”. Algunas de las propuestas concretas pasan, por ejemplo, por “sacar los contenedores de la Dársena del Este, que no deberían estar ahí. Esta es una de las zonas que tendrían que pasar a la ciudad”. Palerm matiza que no dicen que se quiten: “Que estén ahí los contenedores hasta que se encuentre otro sitio, pero ese espacio no está optimizado”.

[apunte]La ciudad antigua. Para Palerm y Tabares de Nava, conectar la ciudad desde el litoral hasta el centro, como la zona de Weyler, es uno de los objetivos fundamentales y para eso trazan, a través de una vía peatonal, un recorrido que permite cruzar la ciudad en paralelo y no en subida. / M. P.[/apunte]

Ciudad antigua

El enlace puerto-ciudad da origen al siguiente punto fundamental del PGO: engarzar la ciudad antigua con la nueva. “El muelle de Ribera está lleno de cruceros y ese espacio tiene que ser asumido por la ciudad como propio”. Lo que plantea el PGO es que los turistas que lleguen en los cruceros puedan cruzar, mediante un puente peatonal, sobre la avenida de Anaga, hasta La Alameda, “donde serían recibidos por la historia de la ciudad”. A partir de ahí, una calle diagonal, la calle Santiago, peatonal, cruzaría la ciudad entrelazando los espacios antiguos con los nuevos. “Un eje turístico y de negocio que llevaría al visitante por la iglesia de la Concepción, TEA, la calle Castillo, El Pilar y el García Sanabria, en un sentido, y el Mercado, el Parque Marítimo o El Corte Inglés, en el otro”.

[apunte]Reservas de suelo. El distrito Suroeste, en el que se encuentra el barrio de Tíncer, era el punto propuesto para la Zona de Actividades Logísticas (clave para la reactivación económica), y para ello el PGO plantea la necesidad de que el Ayuntamiento reserve suelo y evitar la especulación en el futuro. / M. P.[/apunte]

Barrios

Para los autores del PGO, ha llegado el momento de que los barrios den un salto cualitativo y añadan a su aspecto identitario el de que “también son ciudad”. “Estamos tejiendo una urdimbre entre los barrios que estaban aislados y no queremos establecer una jerarquía centrípeta, sino unas relaciones transversales entre los espacios”. Para esto, los arquitectos Tabares de Nava y Palerm consideran que es fundamental dar soporte a las infraestructuras. “Hemos creado una malla construida sobre una ciudad que, fundamentalmente, estaba basada en la penetración hacia la montaña, en el eje Santa Cruz-Laguna-carretera del Sur, y donde la interacción entre los diferentes barrios era muy difícil. Así, toda la circulación, con espacios libres públicos incluidos, se asienta sobre un trenzado que interconecta toda la ciudad de Santa Cruz, de norte a sur y de este a oeste”, destacan los autores del PGO.

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La Refinería. El PGO, aunque no establece fechas ni cómo ni cuándo, sí que recoge, como punto esencial, que la Refinería tiene que salir de la ciudad y que hay que gestionar ese espacio desde el Plan. / M.P.[/apunte]

[apunte]Soporte de infraestructuras. Para conseguir que la ciudad se reactive económicamente, el PGO debe implementar las infraestructuras para lograrlo y eso se hace, según sus autores, a través de la gestión del suelo y de las carreteras, reservando en un caso y creando en el otro, y siempre en base a una seguridad jurídica que permita su desarrollo. / F.P.[/apunte]