VICENTE PÉREZ | Santa Cruz de Tenerife
Como ya hicieran hace 103 años con la erupción del volcán Chinyero, los vecinos de Guía de Isora se han encomendado esta tarde a su patrona, la Virgen de la Luz, en rogativa para que se apague el incendio.
Unos 200 vecinos con lágrimas en los ojos han sacado en procesión la imagen por iniciativa propia, según el párroco accidental, el padre Ulises, “al ver que no se apaga y no hay medios suficientes”, cuenta.