Un dispositivo reducirá los tiempos de actuación ante un paciente con infarto

EFE | Santa Cruz de Tenerife

Un nuevo dispositivo, que se implantará en las ambulancias del SUC, permitirá a los cardiólogos del Hospital Universitario de Canarias (HUC) disponer en tiempo real de los electrocardiogramas y reducir en casi 130 minutos el tiempo de actuación en un paciente con infarto de miocardio.

Este dispositivo forma parte de un proyecto, promovido por el servicio de Cardiología del HUC en colaboración con la Universidad de Vigo que, según el cardiólogo Francisco Bosa, permitirá reducir los tiempos de intervención ante un infarto de miocardio y con ello, dijo, salvar vidas.

El especialista recordó en rueda de prensa que un infarto se produce debido a una obstrucción de la arteria coronaria y el tratamiento consiste en desobstruirla lo antes posible y de esta forma evitar el daño en el músculo miorcádico y salvar al paciente. y destacó la importancia de tener una red asistencial coordinada que permita la atención lo antes posible del enfermo infartado.

Por ello Bosa explicó que la primera parte de este proyecto pionero en Canarias ha sido crear una red asistencial para el tratamiento del infarto agudo de miocardio en el norte de Tenerife, que comenzó a funcionar en diciembre, y el objetivo es consolidarla y extenderla al resto de los hospitales públicos de la Comunidad Autónoma.

Afirmó que, según los estudios realizados, desde enero a marzo del año pasado, cuando aún no estaba implantada esta red, el tiempo que transcurría desde que a un paciente se le detectaba un infarto hasta que era tratado era de 187 minutos, mientras que desde enero a marzo de este año, y con el nuevo sistema puesto en marcha, el tiempo se ha reducido a 55 minutos.

Respecto al nuevo dispositivo que se instalará en las ambulancias del SUC, el especialista explicó que permitirá realizar el electrocardiograma hasta en el propio domicilio del paciente y transmitir los datos al cardiólogo de guardia del HUC y al coordinador sanitario del SUC presente en la sala operativa.

De esta forma se reduce el tiempo entre que se observan los primeros síntomas hasta que se realiza una angioplastia temprana o en su defecto una fibrionolisis precoz.

El jefe del servicio de Cardiología del HUC, Ignacio Laynez, dijo que al año se atienden en el HUC unos 120 infartos y subrayó que estos nuevos dispositivos, aunque representen una inversión, suponen un ahorro evidente en salud y en las prevención de nuevas intervenciones ya que se actúa de forma rápida en el paciente y con ello se reduce el daño miorcádico.

Por ello, pidió a la administración sanitaria un esfuerzo para mantener y extender este proyecto.

Al respecto la directora general de Proyectos Asistenciales del Servicio Canario de la Salud, Hilda Sánchez, comentó el esfuerzo que se está realizando para la puesta en marcha de proyectos sanitarios basados en la coordinación y en las nuevas tecnologías.

Sánchez citó ejemplos como el especialista virtual que permite por vía telemática al medico de atención primaria consultar con los especialistas y el proyecto retisalud, en el que médicos de Atención Primaria realizan retinografías a pacientes diabéticos y la lectura de las pruebas las realizan los oftalmólogos.

Apuntó que la implantación de las tecnologías en materia sanitaria tiene especial interés en las islas no capitalinas.

El gerente del HUC, Ignacio López, felicitó al servicio de Cardiología y al SUC por poner en marcha una red asistencial que mejorará la asistencia y estimó que este proyecto es un factor determinante en el diagnóstico del infarto.

También el responsable de recursos sanitarios del SUC, Mario Santana, destacó la implantación del nuevo dispositivo y la coordinación con los servicios sanitarios.