TINERFE FUMERO | Santa Cruz de Tenerife
Ya son tres los involucrados y se les ha tomado declaración por dos incendios distintos, según confirmaron ayer a este periódico fuentes cercanas al caso.
La noticia adelantada ayer por DIARIO DE AVISOS acerca de lo avanzado de las investigaciones que lleva a cabo la Guardia Civil sobre los fuegos que han castigado la Isla Colombina durante este verano va más allá del episodio de Alojera, que coincidió la semana pasada con los del Sur de Tenerife y La Palma, y también incluye el episodio acaecido en Arure y Las Hayas.
Los investigadores de la Benemérita apuntan, en principio, a que el caso de Alojera, un fuego que afectó fundamentalmente a unos cañaverales y que puso en peligro a varias viviendas dentro del término municipal de Vallehermoso, puso deberse a una imprudencia.
Por contra, nada cuenta la fuente aludida sobre el origen de lo acaecido en Arure y Las Hayas, que se inició cerca de la medianoche del pasado día 28 de junio y el fuego bajó hacia la parte alta del barranco de Valle Gran Rey al declararse un foco en la zona del Retamal, donde tuvieron que intervenir los vecinos para sofocarlo.
Material incendiario
A este respecto cabe recordar que el alcalde de Valle Gran Rey, Miguel Ángel Hernández, apuntó entonces a Efe que el fuego había sido intencionado, a la par que recordó que el día de San Juan se registraron cuatro conatos de incendio y en alguno se encontró material incendiario.
Incluso, debido a las sospechas de peligro existentes ante los antecedentes descritos, la zona estaba vigilada por efectivos de Medio Ambiente pero no se pudo evitar el incendio que, según enfatizó Hernández, “puso a Valle Gran Rey al borde de una desgracia”.
A este respecto cabe recordar que el Gobierno de Mariano Rajoy ya ha anunciado su intención de agravar la pena por este tipo de delito, aumentando de cinco a seis años de prisión el grado máximo de privación de libertad.
Además, esta reforma conllevará que los imputados por estos crímenes puedan pasar más tiempo en prisión provisional.