DOS ISLAS EN LLAMAS > LA GOMERA Y LA PALMA, VÍCTIMAS DEL FUEGO

Logran acotar el fuego en La Palma tras tres días de lucha

Zona quemada en el municipio de Villa de Mazo. / EFE

EUGENIA PAIZ | Mazo

El fuego en La Palma, con unas 1.700 hectáreas de zona de pinar y monte bajo afectadas, sigue activo, aunque acotado, en el frente de la Montaña de Niquiomo, dejando atrás la gran amenaza que supuso durante los pasados tres días para núcleos habitados como La Sabina y Montes de Luna.

El amanecer del cuarto día desde que se declaró el segundo incendio que la Isla ha registrado este verano en menos de 15 días abre espacios para una mayor tranquilidad entre los miembros de los equipos de extinción, quienes ayer concentraban sus esfuerzos, como ocurre también en la jornada de hoy, en mantener a raya el fuego en todo su perímetro, con la colaboración de dos helicópteros y el hidroavión que, aunque con cierto retraso, llegó desde Madrid la tarde del domingo tras ser solicitado por el Gobierno de Canarias 24 horas antes.

Lejos de despejar aún la preocupación, el consejero insular de Medio Ambiente, Carlos González Mata, reconoció en la tarde de ayer: “Estamos más tranquilos pero conscientes de que ahora tienen que pasar las horas y seguir rematando el trabajo que ha realizado todo el operativo”. En declaraciones a este rotativo afirmó: “Lo peor ya ha pasado y el fuego no se nos va a escapar, pero seguimos activos con todos los medios y realizando un intenso trabajo”.

Uno de los hidroaviones en las labores de extinción en La palma. / DA

[apunte]

Investigación

La Guardia Civil tendrá ahora que asumir otro arduo trabajo: el rastreo y examen exhaustivo de la zona de donde partieron las llamas que originaron este siniestro, en un área muy próxima a la que en 2009 fue la génesis de uno de los incendios más devastadores que recuerda La Palma, que alcanzó el municipio de Fuencaliente, y provocó daños materiales muy importantes. La vuelta a la normalidad de la población se produce mientras varios retenes de Medio Ambiente siguen refrescando las zonas donde resurgen llamas, producto de la combustión bajo tierra, mientras las temperaturas en el subsuelo bajan gradualmente. Fuentes autorizadas del Cabildo explican: “Estamos más tranquilos pero conscientes de que ahora se tiene que rematar el trabajo realizado”.

[/apunte]

Zona afectada por el incendio. / INFOGRAFÍA: A. MATUTE