política >

Petróleo, un conflicto crudo

Imagen de la audiencia entre el Rey Mohamed VI y el presidente de Canarias, Paulino Rivero, el pasado abril. / EFE

DOMINGO NEGRÍN MORENO | Santa Cruz de Tenerife

El conflicto del petróleo rebasa los límites de las discusiones sobre el rendimiento económico y el impacto medioambiental para adentrarse en el pantanoso terreno de la geoestrategia.

En medios diplomáticos españoles preocupa que la permanente confrontación del Ejecutivo regional con el Gobierno de la nación vaya acompañada de un inquietante acercamiento al vecino reino alauí, cuyas ansias expansionistas no son un secreto. Si bien la visita de Paulino Rivero a Marruecos, en abril, respetó el protocolo, el hecho de que el presidente se fotografiara con el rey Mohamed VI en pleno tira y afloja a cuenta de las licencias otorgadas a un consorcio encabezado por Repsol para la búsqueda de hidrocarburos en las proximidades de Lanzarote y Fuerteventura generó suspicacias en los servicios de inteligencia. Máxime, cuando Rabat ejerció de portavoz de las tesis isleñas frente a los argumentos del ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria.

En este escenario, la ayuda prestada a La Gomera durante el incendio forestal se interpretó en determinados círculos como algo más que un inocente gesto de solidaridad. La indefinición en el ordenamiento jurídico de las aguas que rodean el Archipiélago es una baza que Marruecos juega a su favor, hasta el punto de que, extraoficialmente, vincula su clarificación a la declaración de un Estado independiente.

Ya en 2002, el Real Instituto El cano alertaba del “desencuentro” y la “confusión” que se derivarían de la toma de decisiones unilaterales en relación al petróleo. La concesión de nueve permisos colindantes, localizados entre la costa de Marruecos y las islas orientales desató una furibunda reacción. En una carta entregada a la Embajada de España, Marruecos calificaba esta circunstancia de “inamistosa e inaceptable”. Rabat argüía que Madrid había delimitado sin consulta previa la frontera entre ambas zonas de interés. España colocó la línea en la mediana.

A todas estas, el experto Íñigo Moré resaltaba que solo hay crudo donde se encuentra. “Y eso se sabrá si se perfora”.