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Clara María Pérez: “Ahora toca ayudar a las personas”

CLARA MARIA PEREZ Arona
Clara Maria Perez, concelaja delegada de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Arona. | DA

AMANDA LUESMA | Arona

Clara María Pérez (CC) lleva relativamente poco tiempo en política. Desde 2007 es la responsable municipal de Servicios Sociales en el Ayuntamiento de Arona, una concejalía que actualmente tiene una gran carga de trabajo por la situación actual que viven muchas familias, y que hace multiplicar las labores de asesoramiento en esta área. El perfil del que solicita alimentos o ayuda al alquiler ha cambiado. Puede ser una persona que hasta hace poco tenía trabajo y ahora no puede pagar sus deudas.

-Hace relativamente poco, cinco años, que se dedica a la política. ¿Qué cree que ha cambiado desde que usted comenzó?

“Cuando llegamos en el año 2007 ninguno sabía la que se nos venía encima. En el año 2008 fue cuando empezó la situación a recrudecerse. Familias que hasta la fecha tenían ingresos, pero que de un día para otro perdieron sus empleos. Lo que teníamos como perfil típico de las personas que recurrían a Servicios Sociales pasó a ser el perfil excepcional, y empezamos con la gente que hasta ese momento nunca se había visto en una situación parecida. Nos vimos realmente desbordados. Tuvimos que contratar a nuevo personal para tramitar más ayudas, se modificaron las bases que regulan la concesión de éstas. La peor de las situaciones de los años de la democracia”.

-¿A qué proyectos de Servicios Sociales se destinan más ayudas económicas?

“Contamos con tres millones y medio de presupuesto y un millón de euros se destinan a partidas para cubrir las prestaciones sociales o ayudas de emergencia social, que cubren las necesidades básicas y extraordinarias como la alimentación, higiene personal, bonos de transporte, tratamientos médicos o alojamiento temporal. También tenemos otro tipo de ayudas que recientemente se aprobaron como la adquisición de libros y material escolar y en poco tiempo se publicarán las ayudas individuales a personas de la tercera edad y a discapacitados”.

-Se ofrecen muchos cursos y talleres sobre temas como discapacitados, jóvenes, interculturalidad, drogodependientes… ¿Cuál es el que más se solicita?

“No sabría decirte exactamente pero tenemos usuarios en todos los programas y servicios que prestamos. Así como novedad, es que estamos en la fase previa a la aprobación del primer plan de igualdad. Recientemente, aprobamos el segundo plan municipal de la atención a las drogodependencias. El Ayuntamiento de Arona también cuenta con una empresa que es Adesa (Arona Desarrollo, Sociedad Anónima), que gestiona el funcionamiento de dos centros infantiles, el de Buzanada y el de El Fraile, un centro de atención a la diversidad funcional en El Mojón, una casa de acogida para mujeres que sufren la violencia de género, un hogar de menores y una residencia para mayores en Los Cristianos”.

-Respecto a otros ayuntamientos, ¿qué tiene Arona diferente en materia de Servicios Sociales?

“Tenemos muchísima más población, para empezar. Al tener más gente tenemos que prestar más atención desde el ámbito social. Desde hace 15 años se ha hecho una apuesta fuerte por el área de Servicios Sociales, por eso somos unos 140 trabajadores contando los de Adesa. Puedo hablar por boca de Arona, pero tengo compañeros en otros ayuntamientos, que son más pequeños, pero que se están esforzando para prestar la mejor de las ayudas a aquellos que más lo necesitan. Todos los ayuntamientos estamos en lo mismo; ahora toca a ayudar a las personas”.

-No hay día en que no veamos publicada en los periódicos la palabra “recortes”. ¿Cómo les han afectado?

“Del presupuesto del anterior curso al de este sólo han disminuido 100.000 euros que se han destinado a proyectos de rehabilitación de viviendas, que no deja de ser políticas sociales. Lo que hemos tratado es de ir administrando bien el dinero, y hemos recortado en nuevos proyectos o en actividades lúdicas. Uno de los objetivos que me propuse cuando llegué aquí, junto con el equipo que me acompaña, es que los mayores se constituyesen en asociaciones, es decir, que pudieran autogestionarse a través de la cuentas de sus socios, que pidiesen subvenciones y consiguiesen más dinero para los proyectos que quisieran llevar a cabo y así, poco a poco, poder independizarse de la gestión pública. Es algo de lo que estamos contentos porque ahora ya existen nueve asociaciones cuando antes solo dos”.

-Ofrecen ayuda a las mujeres que sufren la violencia de género. ¿Son muchas las mujeres que recurren a ustedes?

“Tenemos un servicio específico en el que contamos con una psicóloga. Muchas mujeres llegan destrozadas y lo que tratamos es de atenderlas y de subirles el autoestima y que se sientan con valentía para dar el paso para poder denunciar, la mayoría lo hace. Tenemos firmado un convenio con el Cabildo y con la Dirección general de Igualdad por el cual recibimos un dinero con el que ayudamos a 10 mujeres, y a sus hijos, ofreciéndoles protección en un centro de acogida cuando ya se han decidido a dar el paso de la denuncia”.

-Acaban de salir unos datos en los que se afirma que la mitad de los parados lleva más de un año buscando empleo. ¿Ve alguna solución?

“Las políticas de empleo son la mejor política social. No sé cómo ni de qué manera, pero invirtiendo. La solución de los problemas de las familias es un trabajo. Muchos me dicen que no quieren vales de alimentos, sino que lo que quieren es un empleo estable”.

-¿Cuál es el camino a seguir en las diferentes materias que se tratan en su área?

“Ahora la prioridad es apoyar a las familias, lo más importante es que a la gente no le falte un plato de comida y que tenga un techo bajo el que dormir. Nuestro preocupación principal es que nuestros vecinos no pasen hambre, y es fuerte decir esto así pero es nuestro objetivo y nuestra realidad: ayudar a las personas necesitadas”.