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Estímulo socialista en Tenerife > Manuel González Álvarez

Nos toca vivir un tiempo en el que se impone el desencanto generalizado y la impotencia ante la adversidad. Ante estos sentimientos caben dos respuestas: la resignación, que nos lleva a continuar el descenso progresivo sin suelo a la vista, o el ímpetu y la iniciativa, que nos llevarán a generar ideas capaces de parar la caída y hacernos remontar.

El PSOE de Tenerife aspira, con pleno convencimiento de su capacidad para afrontar el reto con éxito, a liderar ese nuevo resurgir para contribuir a que la sociedad tinerfeña sea capaz de superar la adversidad. Para ello, primero debemos ser autocríticos y reciclarnos como organización política. Olvidando las rémoras y ataduras del pasado, las rivalidades destructivas y el rencor, podremos construir desde las bases una organización sinceramente unida, seriamente comprometida con la ciudadanía, más allá de las palabras vacías, de las poses estudiadas para los periodos electorales. Para ello, celebramos los próximos 29 y 30 de septiembre nuestro XV Congreso Insular. El paso está dado, como saben todos los militantes, a los que he comunicado personalmente la decisión de optar a la Secretaría General de la Agrupación Socialista Insular. Está dado con firmeza y con humildad, sin estridencias, convencido de que es el momento apropiado para darlo y de que es válido para intentar llevar a la práctica un proyecto colectivo en el que todos los socialistas tenemos cabida. Hay decisiones en la trayectoria del militante que son trascendentes. Y ésta es una de ellas. Aceptar una candidatura, integrarse en un órgano de dirección, representarlo, defender un programa, participar en un congreso… Quienes hemos vivido cualquiera de estos trances, tras haberlos asumidos activamente, sabemos que significa un acto de responsabilidad que, a su vez, sirve para reafirmar el ideario y el compromiso socialista. En ese sentido, presento esta candidatura a la Secretaría General de los socialistas de Tenerife para revitalizar los afanes de compañeros y compañeras y para recuperar la confianza de la ciudadanía. En unas fechas adversas para la política y los políticos, quienes creemos en ella y nos dedicamos a ella estamos de alguna manera obligados a llevar a la práctica nuestras ideas y nuestras alternativas. Creo en la política, en su preponderancia en un marco de crisis económico-financiera. Y creo en el socialismo democrático para abrir nuevos caminos y encontrar soluciones a los problemas que nos agobian. Tenerife también los padece y es necesario superar el desencanto y la desmoralización de amplios sectores ciudadanos. La Isla necesita a los socialistas porque ya sabe de su seriedad y de su otra forma de gobernar. En el respeto a la institucionalidad, hemos cimentado la confianza que históricamente nos han otorgado los tinerfeños. Ahora hay que renovarla a base de un proyecto homogéneo, creíble e ideologizado. En él queremos que se sientan identificados, sin exclusión, los socialistas de Tenerife. Abogo claramente por un socialismo abierto para una democracia de ciudadanía. Y por un modelo de partido más atractivo, que favorezca la recuperación de valores, en el que no haya exclusiones y en el que la riqueza de los análisis y los debates plasme el pluralismo vitalista y consecuente de una organización que ahora debe afrontar con espíritu crítico, rigor y talante innovador las exigencias del presente y del futuro. Debe hacerlo con valentía; sintiéndose sus integrantes dueños de sus destinos. Pretendo ser el candidato de todos. Aspiro a ganar la confianza de los delegados. Contamos con proyecto y con personas. Trato de producir un estímulo socialista colectivo; un estímulo que debe irradiarse en una isla que precisa de aportaciones como las que el PSC-PSOE puede realizar.

*Candidato a la Secretaría General de los socialistas de Tenerife