santa úrsula >

La agricultura siembra futuro

vuelta al campo, santa ursula agricultura huerto
Los responsables esperan superar el éxito de la primera edición. / DA


LUIS F. FEBLES
| Santa Úrsula

La muerte del ladrillo da una oportunidad a la tierra. El duro reciclaje de aquellos que en su momento nutrieron la mano de obra destinada a la construcción tienen ahora la oportunidad de buscar, si la suerte es benévola, un futuro laboral en la agricultura. Con el escudo de la formación y la espada de la ilusión, un grupo de 15 personas, desempleados y sin límite de edad, serán formados en horticultura y fruticultura en Santa Úrsula, para encontrar así un destino profesional vinculado con este gremio.

Todo ello, a través del proyecto Vuelta al Campo II, la segunda parte de esta iniciativa impulsada por el área de Agricultura del Ayuntamiento norteño, que tantos éxitos cosechó en la edición del mes de febrero. Desde principios de octubre, durante tres meses y tres días en semana, los alumnos acudirán a una de las parcelas (son tres) que se encuentra situada en la carretera provincial, dentro de la parcela anexa a la Casa de la Portuguesa, para in situ, preparar el terreno de cara a labores de siembra o transplante en explotaciones agrícolas y recolección en cultivos hortícolas y frutales.

La vocación social de este proyecto es clara: los participantes, que serán becados con 200 euros, destinarán los productos conseguidos a Servicios Sociales.

Para el Gobierno local (PP-PSOE), la iniciativa contribuirá a la mejora de los niveles formativos de los agricultores del municipio y la puesta en marcha de un plan de formación relacionado con la horticultura y la fruticultura que afecta al sector primario municipal. Además, servirá para favorecer la reducción en el abandono de tierras agrícolas por la baja rentabilidad que muchas de ellas ofrecen a sus propietarios y para la búsqueda de la diversificación productiva en el ámbito agrario. Para la alcaldesa de Santa Úrsula, Milagros Pérez (PP), “la posibilidad de que este amplio número de desempleados conozca que la agricultura es un modo de vida y que detrás de la formación de la gente está la base de su futuro laboral es vital para nosotros”. “He dado valor a las posibilidades que tiene nuestro campo”.

No es la primera vez que el grupo de Gobierno apuesta por este tipo de empleabilidad agrícola, ya que desde principios de año, los convenios, talleres y actividades de formación agraria han sido frecuentes.

La Casa de la Portuguesa, un inmueble de estilo colonial británico del que existen escasos ejemplos en la Isla y que fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en el año 2007, posee una superficie anexa donde trabajan los alumnos de este proyecto. El terreno destinado a tal fin mide unos 1.600 metros cuadrados con una altura sobre el nivel del mar de 300 metros.

Cuesta Perera

La segunda parcela, ubicada en la Cuesta Perera, tiene una superficie de 1.550 metros cuadrados y se encuentra a una cota de 400 metros. Tanto las dimensiones como el lugar donde se localiza la parcela la hacen ideal para la producción de hortalizas y árboles frutales, entre otros cultivos a desarrollar.

El tercer terreno se encuentra situado en la calle Tijarafe y su extensión aproximada es de 3.000 metros cuadrados. Por último, se estima que este ilusionante proyecto pueda abastecer de hortalizas y frutas a un total de 150 personas, en el año que dura la actividad formativa.