EUROPA PRESS | Sevilla

La Audiencia Provincial de Sevilla ha condenado a 12 años de cárcel y al pago de una indemnización de 12.000 euros a un hombre de 78 años de edad por abusar sexualmente de seis niñas de entre siete y nueve años de edad en un colegio público de la localidad sevillana de Gelves, entre ellas una menor de siete años que caminaba en muletas.

En la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, la Sección Primera relata que los hechos tuvieron lugar entre las 12,00 y las 12,30 horas del día 7 de febrero de 2011, cuando el acusado, J.B.P., abordó a varias alumnas menores de edad de un colegio de Gelves “animado por la intención de satisfacer sus desviados impulsos y deseos sexuales”.

De este modo, “y previa comprobación de no encontrarse presente personal docente”, el procesado se dirigió a las menores “con preguntas improcedentes sobre si tenían novio” a fin de “acariciarlas mediante tocamientos lascivos”, destacando que algunos de estos hechos han quedado grabados por las cámaras de seguridad del centro.

Así, y en primer lugar, abordó a una menor de nueve años y, “tras preguntarle expresamente su edad y si tenía novio, le acarició la cara y el cuello, preguntándole cínicamente si le gustaban más las caricias en una parte u otra de su cuerpo”, tras lo que la niña se marchó.

No obstante, la volvió a abordar a los tres minutos, “acariciándole en esta ocasión cara, cuello y pecho”, momento en el que la víctima “le apartó la mano, adoptando el acusado una actitud de disimulo por la aproximación de personal docente”.

Una menor en muletas

En otra ocasión, se acercó a una menor de nueve años y realizó los mismos actos, tras lo que abordó a otras cuatro niñas “a las que trató de acariciar, ante lo cual las menores se ausentaron precipitadamente”. Seguidamente, abordó a una niña de ocho años a la que preguntó “con desvergüenza e hipocresía si le gustaban más las caricias en una parte u otra”.

También se acercó a una menor de siete años que caminaba en muletas y le acarició la cara, “retirándose la menor bruscamente por desagrado o recelo, estando a punto de perder el equilibrio ante la brusquedad de su maniobra evasiva”.

El juicio no llegó a celebrarse después de que el acusado mostrara su conformidad con los hechos, tras lo que la Audiencia Provincial lo ha condenado a 12 años de cárcel por seis delitos de abusos sexuales, así como al pago de 2.000 euros a cada una de las seis afectadas.