LUIS F. FEBLES | Puerto de la Cruz

Las empresas extranjeras guiñan el ojo a Puerto de la Cruz. Un grupo inversor polaco arrienda el cine Chimisay, de propiedad privada, para la creación de un pionero museo de cera en una de las principales vías comerciales de la ciudad turística.

Luego de tramitar en la gerencia de Urbanismo una licencia de obra menor para reformas internas, los nuevos inquilinos trabajan ya en la remodelación del interior de la histórica sala de cine para cambiar su estructura, después de que el consistorio les confirmara que este tipo de usos está contemplado dentro del Plan de Modernización.

Ahora sólo falta la presentación del proyecto, previsiblemente en un mes, y que el Grupo de gobierno (CC-PP) apruebe esta iniciativa. Fuentes del Ejecutivo local aseguran a este periódico que se trata de “una posibilidad cercana que puede aportar un atractivo diferente al municipio”. “Van en serio y si todo transcurre por los cauces normales, no habrá problema para darle el visto bueno; se superó uno de los inconvenientes, el tipo de usos a disponer”.

No obstante, también indican que “existe algún interés para albergar una importante marca de ropa, pero por el momento no hay nada seguro; la popular calle de San Juan se presta a este tipo de iniciativas comerciales”.

Una de las ideas presentadas por el grupo empresarial es colocar en la fachada del edificio figuras que anuncien e inviten a los viandantes a entrar a un museo que tendrá la impronta y la influencia de los impulsados por esta asociación en los países del Este. Actualmente, el interior del inmueble sigue siendo objeto de limpieza y preparación, sin que hasta el momento hayan empezado con los trabajos que requieren mayor despliegue.