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Confirman que en el barranco de Tafuriaste hay cabras con fiebre Q

Cabras barranco de Tafuriaste, La Orotava
Los vecinos llevan 15 años sufriendo el problema de las cabras en el barranco de Tafuriaste. / MOISÉS PÉREZ

G. GULESSERIAN | La Orotava

La Dirección General de Ganadería del Gobierno de Canarias confirmó el miércoles por la tarde que ejemplares de cabras que se encuentran en el barranco de Tafuriaste están afectadas por la fiebre Q, una enfermedad que se transmite a los humanos pero que es tratable con las debidas medidas higiénico-sanitarias. Los síntomas que se padecen son similares a los de una gripe intensa que se prolonga por más de diez días con fuertes dolores de cabeza. Hasta el momento solo se ha registrado un caso de personas afectadas.

Una vez conocidos los resultados de los cultivos, el citado departamento convocó ayer una reunión urgente con las administraciones implicadas, las consejerías de Agricultura del Gobierno de Canarias y del Cabildo de Tenerife, la Dirección General de Salud Pública, el Consejo Insular de Aguas y el Ayuntamiento de La Orotava, para buscar una solución definitiva al problema de las cabras en los barrancos. Así, en el encuentro se dio el visto bueno a una propuesta de la corporación villera de llevar a todos los animales que habitan en el barranco, unos 300, a una finca ubicada en las medianías, de propiedad insular, que se encuentra debidamente vallada, aunque no se especificó el lugar exacto, confirmaron varios de los asistentes. Asimismo, se acordó el desmantelamiento de las cabrerizas y la limpieza y desinfección de toda la zona. Posteriormente, el grupo de gobierno de La Orotava decidió darle un plazo máximo de 72 horas a los cabreros para retirar el ganado.

En el caso de que no se cumpla esta orden, el Consistorio actuará con los medios y la logística necesaria para ejecutar un traslado forzoso. De hecho, la corporación local ya está preparando las medidas oportunas en caso de que tenga que actuar.

Los vecinos de las urbanizaciones Corina, Tafuriaste, Las Viñas, San Miguel, Las Candias, La Playita y el barrio de San Antonio sufren desde hace 15 años este problema.

Hartos ya de esta situación y de no encontrar respuesta por parte de las diferentes administraciones, el miércoles habían organizado una asamblea en el local de la Asociación de Vecinos San Miguel para decidir las medidas que iban a adoptar de cara al futuro, teniendo en cuenta que había una persona afectada con fiebre Q.

El encuentro fue suspendido dado que el Ejecutivo municipal los convocó con carácter de urgencia para confirmarles el resultado de los análisis e informarles de la reunión de ayer.

El portavoz de los vecinos, Enrique Luis, quien además es portavoz del grupo municipal del Partido Popular (PP), asegura que “el gran mérito de los ciudadanos ha sido presionar, de forma silenciosa y sin alarmar a la población, para que, por fin, se tomen medidas”.

Una decisión que se demoró en el tiempo pese a que el Ayuntamiento, al tratarse de un problema sanitario “puede actuar de oficio”, recalcó. En este sentido, el portavoz vecinal subrayó que se han sentido “toreados” por todas las administraciones dado que ninguna quiere asumir su responsabilidad de este asunto.