NATALIA TORRES | Santa Cruz de Tenerife

Hasta un 30% ha crecido el volumen de negocio de los comercios ubicados en la avenida del santacrucero barrio de San de Andrés tras las obras que se realizaron durante el verano. Una actuación que dotó a la zona de 40 nuevas plazas de aparcamiento además de reabrir al tráfico el carril que permanecía cerrado desde los últimos destrozos que provocó la subida de la marea en agosto de 2011. Así lo aseguró el edil de Obras y Servicios del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, Dámaso Artega, que explicó que, “el resultado de la obra ha sido más que satisfactorio y prueba de ello es la mejora del volumen de negocio así como la ausencia de retenciones”.

Esta afirmación es compartida por los propios comerciantes, como es el caso de Ramón Plasencia, propietario de la Marisquería Ramón, quien señaló a este periódico que “hemos cogido aire después de tantos meses en los que esto parecía un campo de guerra”. Plasencia valoró muy positivamente el aumento de visitantes al barrio, ya que “aunque toda la gente no entre a los comercios, lo cierto es que se acercan a pasear y esto está lleno casi siempre”.

Adjudicación

Las obras realizadas en verano son sólo la avanzadilla del proyecto definitivo con el que el Ayuntamiento de Santa Cruz quiere cambiar por completo el aspecto de la avenida marítima, una obra que tal y como confirmó Arteaga, se espera que pueda comenzarse en el mes de diciembre. Este retraso sobre lo anunciado inicialmente se debe a que aún no se ha adjudicado la realización de las obras, algo que el edil de Obras y Servicios espera que se produzca en las próximas semanas. A partir de conocerse quién realizará la remodelación de la avenida, en un mes aproximadamente, se podrá dar comienzo a su desarrollo. Actualmente se está dando respuesta a las alegaciones presentados durante el periodo de exposición pública. A Ramón Plasencia por su parte, lo que más le preocupa de este retraso es que la intervención en la avenida se prolongue hasta el verano: “Perdimos el de 2011, cuando el mar me destrozó el local y también hemos perdido este último con los carriles en obras. No podemos permitirnos un verano más con la avenida cerrada y llena de obras porque entonces sería imposible continuar con el negocio”.

Durante el año que ha permanecido cerrado uno de los carriles, esta circunstancia y la propia crisis ha afectado sobremanera a los negocios del barrio y ha obligado a muchos al cierre de sus locales.

Con las obras realizadas durante el verano, la mayoría de los comercios han logrado coger algo de aire para continuar.

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Afluencia

De las actuaciones que más se muestra satisfecho Arteaga es de la nueva zona de estacionamiento que parece ser la culpable de que la gente se anime a visitar más San Andrés, incluso, añade, “nos han solicitado que se amplíen las plazas y es algo que se estudiará”. Además, “no se han vuelto a producir retenciones de tráfico desde que procedimos a la apertura de uno de los carriles de la avenida y el tráfico circula con fluidez”. El edil reconoce que, aunque al principio hubo un poco de confusión con las señales que recomendaban no aparcar cerca de la línea de mar, ahora se ha mejorado el paseo, separándolo de la calzada con vallas.

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