TINERFE FUMERO | Santa Cruz de Tenerife

“Exconvicto visto en Bajamar. Fue condenado por violación y asesinato de un menor. Alerta a tus hijos”. Carteles con esta leyenda, que va acompañada de la imagen de un varón de unos 30 años de edad, se despertó el domingo el bello paraje lagunero, cuyos vecinos viven días de sozobra ante el supuesto retorno al lugar de Mahy Medina Monzón, el entonces muchacho de 17 años de edad que asesinó cruelmente a un niño de 6 llamado Jacobo, al que tras apuñalar con unas tijeras en 16 ocasiones le aplastó la cabeza con una piedra de 20 kilos. Fue a finales de junio de 1998, y el brutal infanticidio acaeció en una cueva.

Desde que algunos vecinos afirmaron haberlo visto por el lugar, la inquietud ha ido creciendo hasta crearse la alarma social que se desprende de los carteles. En las redes sociales no ha dejado de circular la foto en cuestión, lo que desde asociaciones vecinales se ha puesto en conocimiento tanto del Ayuntamiento como del propio Cuerpo Nacional de Policía. Si bien ayer domingo fue imposible una confirmación sobre si realmente la inquietud estaba justificada, fuentes extraoficiales reconocieron que se está realizando un seguimiento del caso. Al fin y al cabo, Medina ya ha cumplido con la Justicia y es libre de ir donde quiera.

Este asesino fue condenado en 2001 por la Sección Segunda de la Audiencia Provincial a 10 años de prisión, y a seis meses por un delito de agresión sexual, con las circunstancias agravantes del lugar despoblado y la atenuante de trastorno de la personalidad. Medina ya llevaba dos años en Tenerife II, pero poco tiempo después de su sentencia entró en vigor la Ley de Responsabilidad Penal de los Menores, que limita a cinco el régimen de internamiento.

Lo que se respiraba ayer en Bajamar era miedo, sobre todo a dejar los niños solos. Para hoy está prevista una reunión policial en la que se tratará el tema.