EFE | Las Palmas de Gran Canaria
El consejero de Educación, Universidades y Sostenibilidad del Gobierno canario, José Miguel Pérez, aseguró hoy en comisión parlamentaria que uno de los grandes problemas de Canarias es la gestión del exceso de residuos sólidos urbanos que se producen en las islas.
José Miguel Pérez, que compareció a petición del grupo Socialista para hablar del tratamiento de los residuos sólidos en Gran Canaria, dijo que en esta isla se recogen unas 500.000 toneladas al año, lo que representa una media de 1,6 kilos diarios por persona, que es en torno al 30 por ciento superior a la media nacional.
La situación de Gran Canaria se puede extrapolar al resto de Canarias, indicó José Miguel Pérez, quien afirmó que aunque se tuvieran los medios adecuados para reciclar el porcentaje de residuos sólidos urbanos en Gran Canaria sería muy alto porque estaría en torno a las 200.000 toneladas al año.
Es un problema de “considerables dimensiones” y en Gran Canaria el tratamiento de los residuos sólidos urbanos se realiza en dos complejos, como son los de Juan Grande y Salto del Negro, señaló el consejero.
José Miguel Pérez recordó que en Canarias hay dificultades como escasez de territorio, elevada densidad demográfica, mucha protección territorial y rechazo a las instalaciones de reciclaje y valorización energética.
Pero hay una “imperiosa necesidad” de reducir el volumen de residuos sólidos urbanos que se destinan a los vertederos, para lo que es preciso aumentar el reciclaje, así como la reutilización y la valorización energética, insistió el consejero.
José Miguel Pérez señaló que la solución requiere de la colaboración de las administraciones y quiso enviar un mensaje alentador, para lo que puso como ejemplo que en Gran Canaria se vencieron los obstáculos para resolver los problemas que había en materia de depuración de aguas.
El diputado del grupo Mixto Román Rodríguez, de Nueva Canarias, consideró que es preciso reconocer que las cosas no se han hecho bien y que la responsabilidad es compartida.
David de la Hoz, del grupo Nacionalista, opinó que el problema radica en el modelo de desarrollo de la sociedad y estimó que los ciudadanos deben responsabilizarse de que habrá que pagar en función de los residuos que se generen.
El diputado del grupo Socialista Emilio Mayoral abogó por modificar la tendencia de generar residuos sólidos urbanos, así como por erradicar los vertidos ilegales, disminuir los vertidos en beneficio de la reutilización, el reciclado y la valorización energética, y por un pago equitativo de los costes.