Por Rebeca Díaz-Bernardo

Hace unos días se publicó uno de esos rankings que rulan por Internet y que a veces nos dejan boquiabiertos por los resultados que arrojan aunque lo que nunca nos dejan es indiferentes. Es más, un par de semanas atrás que estaba insomne un domingo por la noche, me quedé por curiosidad en uno de esos canales de televisión raros con uno de esos mismos rankings aún más raros, las diez cirugías más frikis de Hollywood, los diez mejores cuerpos de Hollywood, los diez enfants terribles de Hollywood… reconozco que son chorradas que enganchan, sobre todo en momentos de aburrimiento.

El ranking que me ocupa hoy es el de la música para el sexo, sea antes, durante o después, y por último las que son mejor que el sexo. Y es que no puedo menos que quejarme un poco, aunque sea a título personal porque no todos opinamos igual, claro está.

En primer lugar, la canción que ha quedado en primera posición como la mejor para ligar en la pista, Dancing Queen de Abba. Me encanta, la bailo cada vez que la escucho, en la ducha, en la sala, hasta en una disco, pero ¿la mejor canción para ligar?, sería en los 70, porque a día de hoy es que yo no me imagino a nadie poniéndose a tono viendo al objeto de seducción bailando eso. Y mira que la siguen en la lista temas como Lady in Red de Chris de Burgh o la banda sonora de Dirty Dancing, esta última mucho más caliente y sugerente, pero ¿Abba…? No estoy de acuerdo.

Luego me leo la lista de las canciones preferidas para entrar en calor y en los dos primeros puestos está Marvin Gaye con dos de sus buques insignia: Sexual Healing y Let’s Get it on. Efectivamente, es que hay que ser de piedra pómez para no ponerse a tono con esos dos temas, porque repiten en el ranking de lo mejorcito para jugar ya entrados en materia, aunque la más escogida es esta vez la banda sonora de Dirty Dancing. Pero luego ya regresa Marvin Gaye, y no tengo nada más que decir porque a estas dos preferencias les siguen otras igualmente sensualonas y animadoras de la libido y estoy de acuerdo con la elección. Pero luego tenemos la lista de las canciones que son mejores incluso que el sexo y me doy de narices con Bohemian Rhapsody de Queen, Sex on Fire de los Kings of Leon, Angels de Robbie Williams, Bat out of Hell de Meat Loaf y por último Living on a Prayer de Bon Jovi, en este orden de preferencia, formando el grupo de las cinco escogidas como temazo para sustituir al sexo. Yo, para no variar, pienso de mí misma que debo ser la rara del equipo, porque no me fastidies que escuchar a Queen, Meat Loaf o incluso mirar al mismísimo Bon Jovi -que da nombre al grupo-puedan ser mejor que el sexo. Y te juro que los adoro, que la música de todos ellos forma parte de la banda sonora de mi vida desde hace casi treinta años, a todas horas y ya sea para correr, para bailar, para conducir, pero… ¿para sustituir el sexo?

Hombre, si te lo planteas como que la gran mayoría de los temas de Queen son pequeñas óperas, lo mismo que los de Meat Loaf, que nunca sabes por dónde te va a llevar al cabo de los tres minutos, que los vídeos suelen ser auténticos mini docu dramas de esos y que ya por último hasta los Teleñecos han parodiado Bohemian Rhapsody y te arrancan una carcajada en pleno tema con sus chifladuras, pues sí, francamente te quitan las ganas de todo y te animan a seguir viendo más de lo mismo.

En cualquier caso, yo personalmente echo de menos en esas listas a Prince o aquel proyecto musical de los 90 llamado Enigma que ahora vuelve a estar de moda con las Cincuenta sombras de Grey por los cantos gregorianos que mezclaban con música electrónica, pero como en gustos no hay nada escrito y antes de que me olvide, este ranking en concreto fue elaborado en el Reino Unido y con gustos de anglosajones, pues ya sé que parece que nunca estoy de acuerdo con lo que opinan allí. Pero insisto, adoro especialmente a Queen y en mi casa seguimos sin perdonarle al Comité Olímpico Español que obviara a Freddie Mercury en la ceremonia de inauguración de Barcelona 92, que mira que ya había tecnología suficiente como para poner un video wall de esos con Montserrat Caballé cantando en el escenario y él grabado al unísono y lo cambiaron todo. Pues aun así, de verdad, no me veo yo diciéndole a mi señor marido en vez del consabido dolor de cabeza algo como “espera que te pongo un tema que se te pasan las ganas…”