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El SCS resta 60 millones a personal en dos años y 8.000 euros a directivos

JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife

A la espera de que la consejera de Sanidad del Gobierno de Canarias, Brígida Mendoza, desglose hoy en comisión parlamentaria los presupuestos de su departamento para 2013, en el borrador que llegó el viernes pasado a la Cámara se incluyen algunas partidas que no parecen seguir la línea de austeridad marcada por el Ejecutivo autonómico. Es el caso de las retribuciones de los responsables de las distintas direcciones generales y áreas del Servicio Canario de la Salud (SCS), cantidades que en algunos casos incluso superan a las consignadas en las cuentas de 2012 y que en términos globales sobrepasan los 940.000 euros.

En este sentido, y siempre según el documento presentado el viernes por el consejero de Economía y Hacienda, Javier González Ortiz, la Dirección General de Recursos Humanos cuenta con un presupuesto de 75.689 euros para gastos de personal, de los que 45.953 aparecen como “otras remuneraciones”. Algo similar ocurre con la Dirección General de Programas Asistenciales, que prevé un total de 73.996 euros, más de 600 euros que los que se contemplaban en el presente ejercicio. Entre los máximos responsables de departamento, el director general de Salud Pública es quien percibirá la cantidad más baja, 70.045 euros, una cifra similar a la que recibirán los responsables de las áreas de Salud de Gran Canaria y Tenerife, para los que se han consignado 69.545 y 69.523 euros, respectivamente.

Comparativamente, el recorte que sufren los directivos del SCS es ínfimo comparado con el que vienen padeciendo las plantillas de Atención Primaria y Especializada. La primera, respecto a 2012, percibirá 6 millones de euros menos el próximo año, mientras que la segunda pierde más de 10 millones. En total, de los más de 28 millones de euros menos con los que contará la Consejería de Sanidad, 20 corresponden al capítulo I, reducción que se suma a la realizada hace un año, cuando se redujeron otros 40 millones que costaron el puesto a más de 1.500 trabajadores eventuales.