economía>

Agricultura ya tiene definidos los 50 guachinches que va a inspeccionar

MARÍA FRESNO | Santa Cruz de Tenerife

GUACHINCHE  LA VICTORIA  MPP
Los guachinches siempre deben vender su vino propio. / MOISÉS PÉREZ

El Gobierno de Canarias ya tiene definidos los 50 guachinches que va a inspeccionar dentro de la campaña que inició el pasado mes de noviembre con el objeto de controlar el uso que se da a la entrada de uva con procedencia exterior que llega a las Islas.

La directora del Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria (ICCA), Sulbey González, lo confirmó ayer, después de asegurar que la inspección se centrará, sobre todo, en las islas de Tenerife, La Palma y Lanzarote, por ser las que más guachinches tienen, y tendrá una duración de dos meses, aunque desde la Consejería de Agricultura no se descarta que este periodo se pueda ampliar, ya que los inspectores están ahora “saturados” con las fechas navideñas, sobre todo los de Consumo.

La campaña, en la que participan varios departamentos de la Administración regional, da respuesta a las demandas que viene planteando el sector vitivinícola local desde hace años. La entrada de esa fruta en las Islas, pese a que es legal, está teniendo efectos negativos en el subsector, puesto que carece de control sanitario y supone una “competencia desleal” para el resto de los bodegueros de las Islas. Según declaró González, no está prohibida la comercialización de la uva foránea, pero sí es “un fraude que esta se venda como vino de la casa o del país, cuando no lo es”. Lo importante es que desde que el Gobierno canario anunció esta campaña han sido muchos los bodegueros y los dueños de guachinches que se han dirigido a la Consejería de Agricultura interesándose por los trámites para legalizarse. De igual forma, los principales ayuntamientos del norte de la Isla, donde están ubicados la mayor parte de los guachinches, también han registrado una gran cantidad de solicitudes de licencias. En el Ayuntamiento de La Victoria, por ejemplo, los técnicos de la Concejalía de Agricultura afirmaron a este periódico que muchos bodegueros han pedido la licencia porque los “guachinches” les han dejado de comprar el vino al no estar etiquetado, tal y como contempla la Ley del Vino. La intención del Gobierno es repetir esta campaña todos los años.

[apunte]Multas desde 30.001 hasta 300.000 euros
No será hasta mediados del próximo mes de enero cuando la Consejería de Agricultura tenga datos sobre las sanciones y procedimientos administrativos abiertos a estos locales. No obstante, según consta en la Ley 24/2003, de la Viña y el Vino, las multas por no tener bien etiquetado el vino (las consideradas graves) pueden llegar de 30.001 euros hasta los 300.000 euros. Además, esta medida será incluida en el Plan de Guachinches que preparan el Gobierno autonómico y el Cabildo de Tenerife. Precisamente, el concejal del Área de Desarrollo Rural del Ayuntamiento de Los Realejos, Domingo García, aseguró que mañana, viernes, mantendrán en la corporación una reunión con los técnicos para unificar con el resto de las administraciones de la Isla las actuaciones a realizar para controlar la actividad de los guachinches. “Hay muchos vinos que se venden como vino del país o de la casa que están elaborados con uva foránea y no cuentan con distintivos que indiquen esa condición, ni están embotellados. Lo mismo ocurre con la comida”, continuó. “Muchos tienen más platos que un restaurante, y esto hay que controlarlo”, sentenció. [/apunte]