EUROPA PRESS | Londres
La Casa Real británica ha asegurado este viernes que “en ningún momento” se quejó al Hospital King Edward por la broma telefónica que llevó a la enfermera Jacintha Saldanha a desvelar datos sobre el estado en que se encontraba la duquesa de Cambridge, Catalina Middleton, horas después de ingresar en el centro por unas fuertes náuseas consecuencia de su embarazo.
La Casa Real británica “no se quejó en ningún momento al hospital por el incidente”, ha subrayado un portavoz del Palacio de Saint James, la residencia oficial de los duques de Cambridge. “Por contra, ofrecimos nuestro apoyo total y de corazón a las enfermeras afectadas y al personal del hospital en todo momento”, ha aseverado, según informa el diario británico ‘The Guardian’.
La Casa Real británica ha realizado esta declaración horas después de que el Hospital King Edward haya confirmado la muerte de Jacintha Saldanha, la enfermera que fue víctima de la broma telefónica de dos locutores de una radio australiana que se hicieron pasar por la reina Isabel II y el príncipe Carlos para conocer la situación en la que la se encontraba la duquesa de Cambridge, Catalina Middleton.
La enfermera, que llevaba más de cuatro años trabajando en el hospital, ha sido encontrada inconsciente este viernes a las 9.30 horas (10.30 hora peninsular española) en un edificio cercano al centro médico en el que trabajaba. El hospital ha destacado que se trataba de “una enfermera de primera clase”.
La Policía británica ha anunciado en un comunicado la apertura de una investigación sobre la muerte de la enfermera. “La Policía fue avisada en torno a las 9.25 AM del 7 de diciembre sobre una mujer que estaba inconsciente en un edificio en la calle Weytmouth”, ha indicado Scotland Yard.
“Acudió una ambulancia y la mujer fue declarada muerta allí mismo. Continúan las investigaciones para determinar las circunstancias del incidente. En este momento, la muerte no ha sido catalogada como sospechosa”, ha indicado la Policía.
PIDEN EL DESPIDO DE LOS LOCUTORES BROMISTAS
Según el diario ‘The Guardian’, las cuentas de la red social Twitter de los dos locutores de la emisora radiofónica 2DayFM que protagonizaron la broma telefónica sobre el embarazo de la duquesa de Cambridge, Mel Greig y Michael Christian, han sido borradas tras confirmarse el fallecimiento de la enfermera.
Los dos locutores habían recibido cientos de mensajes en Twitter tras la broma telefónica, algunos de usuarios que pedían que fueran despedidos por su actuación. ‘The Guardian’ ha recordado que la emisora radiofónica ha sido 2DayFM ha sido sancionada en dos ocasiones por incumplir el código ético de la Autoridad Reguladora de las Telecomunicaciones australiana.