sociedad>

La ciencia, condenada al destierro

becarios2.jpg
De izquierda a derecha, Natalia Rodríguez, Emilio Verche, Haridian Cañete y Celia Morales. | DA

JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife

La investigación ha dejado de ser una prioridad para nuestro país. Bajo el paraguas de la crisis, los gobiernos central y autonómico han puesto contra las cuerdas a la generación mejor formada de la historia. Sus integrantes, estudiantes universitarios o recién licenciados, tendrán que hacer las maletas si finalmente se aplican a rajatabla los presupuestos del Estado y los de la Comunidad Autónoma de Canarias. En el caso concreto del Archipiélago, los ajustes que el Ejecutivo prevé aplicar a la I+D+i que desarrollan 95 becarios impedirán además a las Islas acceder a los fondos que la Unión Europea destinará entre 2014 y 2020 a la Estrategia de Especialización Inteligente, que exige la continuidad de los más de 30 proyectos que hay en marcha. Algo imposible con la dotación prevista inicialmente para 2013, que apenas llega a los 250.000 euros, el 96% menos que este año, cuando se consignaron seis millones de euros. Entre los damnificados por el tijeretazo está la tinerfeña Haridian Cañete, bióloga molecular.

Según relata al DIARIO, su contrato finaliza en febrero, pero presumiblemente se lo rescindirán a final de mes. “Llevo cuatro años trabajando en el estudio de los miomas uterinos, tumores benignos que afectan principalmente a mujeres mayores de 45 años. Es una enfermedad que no está muy tratada, porque al ser un tumor benigno y presentar poca sintomatología, se ha dejado de lado. Pero puede provocar problemas importantes, como anemia, hemorragias, etc. Hasta ahora el único tratamiento efectivo era con cirugía”, incide Haridian, cuyo estudio se basa en la búsqueda de las características moleculares de estos tumores, para “detectar posibles dianas terapéuticas y de diagnóstico”. Después de dos años de beca y dos más con contrato, su objetivo y el de sus otros tres compañeros de proyecto era continuar investigando en Canarias, algo que presumiblemente no sucederá. “Con los recortes que se prevén, ni tendré la posibilidad a de acceder a otro contrato, ni tampoco habrá opción de que nadie se incorpore a mi proyecto para continuarlo”, subraya la bióloga isleña.

Para Haridian, “más allá de los problemas personales, la realidad es que llevamos muchos años de recortes, y ahora ni siquiera los jóvenes van a poder formarse aquí, por lo que la única salida será marcharse. Y los que se vayan, ya no tendrán hueco cuando vuelvan, porque ni las universidades ni los centros de investigación tendrán plazas que ofrecer”, asevera la bióloga.

En la misma línea se manifiesta Emilio Verche, de 27 años, licenciado en Psicología por la Universidad de La Laguna (ULL) y máster en Neuropsicología Clínica. “En mi grupo de investigación somos tres afectados. Llevamos desde 2008 investigando las repercusiones entre la cognición, la memoria y la percepción en la emoción y la conducta de niños y adolescentes que padecen distintas patologías. Por ejemplo, trabajamos sobre el trastorno por hiperactividad, las dificultades de aprendizaje, los problemas que generan los tumores, el desarrollo físico y mental de los prematuros, etc.”. “En teoría, deberíamos terminar en marzo de 2014. Pero, si nos dejan sin fondos, estos proyectos se quedarán aparcados, porque no podemos trabajar por amor al arte”, denota el joven psicólogo, quien recuerda que “el Gobierno de Canarias nos exigía exclusividad, por lo que durante todo este tiempo no hemos podido dedicarnos a otra cosa”. En su opinión, “la investigación es una inversión de futuro, y para volver a reactivar el sector harán falta muchos años”. “En Canarias se están desarrollando proyectos en múltiples campos, como la agricultura, el transporte, la medicina, la biodiversidad, la psicología, el turismo, etc. y todos se quedarían a medias. Pero el problema no es solo que esos proyectos no salgan adelante, sino que no se apueste por un modelo social basado en la investigación y el desarrollo”, arguye Emilio.

Una afirmación que suscribe otra joven investigadora afectada por los futuros recortes, la bióloga Natalia Rodríguez, de 28 años. Desde hace cuatro trabaja en la elaboración de un mapa de los suelos del Teide, una demanda del propio Gobierno de Canarias para el Parque Nacional. Su contrato finalizaba el 15 de enero, pero ahora no sabe cuál será su futuro. “Con estos recortes se pone en peligro el futuro de la investigación en Canarias y en España, porque también estamos hablando de que se van a eliminar muchas becas y proyectos que para nosotros suponían una salida laboral”, expone Natalia, quien al igual que otros muchos investigadores está pensando en hacer las maletas y marcharse a otra región o al extranjero. “Tal y como están las cosas, la solución pasa por salir fuera, no solo para los científicos que están trabajando aquí, también para los jóvenes que están ahora en la universidad”. “Muchos profesores se jubilarán en apenas cinco años, y si continúan los recortes, por ejemplo, no se va a poder formar a personal cualificado que los sustituya”, asegura la bióloga de la universidad lagunera.

Su caso es similar al de Celia Morales, de 29 años y licenciada en Psicología y Pedagogía. Su proyecto, que se inició en 2011, se basa en el estudio de las dificultades de aprendizaje psicolingüísticas. Patrocinado por la Agencia Canaria de Investigación y la Unesco, el objetivo de su trabajo es “que los niños mejoren el aprendizaje de la escritura, porque tanto la Unión Europea como el propio Ministerio de Educación han elaborado estudios que determinan que en España el nivel de aprendizaje está por debajo de la media europea”. “Se trata de un proyecto con enorme repercusión social, porque ayudaremos a mejorar el proceso de enseñanza y el propio desarrollo del aprendizaje del niño”, explica Celia, cuyo proyecto debía concluir en 2015. “A partir del 1 de enero, nos quedamos sin fondos, por lo que el estudio se quedaría paralizado”. De nada servirían entonces los años de sacrificio para obtener una beca o un contrato, que en la mayor parte de los casos apenas supera los 1.000 euros de sueldo. “Hay que tener un buen expediente, una tesis bien fundamentada y útil para la sociedad y un director académico que tenga también un buen currículum”, señala la joven psicóloga, que confía en que prosperen las enmiendas a los presupuestos y el Gobierno de Canarias “recapacite”. “Si no, tendríamos que hacer las maletas. No nos quedaría otro remedio”, concluye.

[apunte]La Oficina de Gestión de Proyectos y Apoyo Técnico ya ha sido “desmantelada”
Puesta en marcha en septiembre de 2009, y respaldada por fondos europeos, la Oficina de Gestión de Proyectos de I+D+i y Apoyo Técnico-Administrativo de los investigadores de la Universidad de La Laguna (ULL), conocida como OAPI, tenía como objetivos dar apoyo a los grupos más competitivos en tareas técnicas y administrativas, para la gestión de proyectos, y propiciar y desarrollar acciones destinadas a mejorar la participación de la propia ULL en proyectos relevantes en investigación, desarrollo e innovación. Con el ajuste previsto para 2013, que deja muy tocada a la Agencia Canaria de Investigación, Innovación y Sociedad de la Información (ACIISI), de la que dependía la OAPI, esta quedará “desmantelada”. No en vano, el pasado 30 de noviembre fueron despedidos los 11 técnicos que asesoraban y prestaban sus servicios a más de 276 científicos para la gestión de sus proyectos.

Uno de ellos es Oliver Guisado, biólogo de 37 años de edad. Tras casi año y medio trabajando en la citada oficina por un sueldo de unos 1.200 euros mensuales. El día 30 le comunicaron que le rescindían el contrato. “Nos dijeron que el motivo eran los recortes, porque se iban a eliminar las dos oficinas de apoyo, tanto la de aquí como la de Las Palmas”. “Por nuestras manos pasaban los proyectos de muchos investigadores, a los que ahora dejamos colgados. Nosotros les ahorrábamos tiempo, para que ellos pudieran dedicarse a investigar y no a gestionar documentos. Además, siempre cobrábamos por resultados, y en general recibíamos menos de lo que aportábamos”, subraya Oliver, quien asegura que “la universidad no quiso ni pudo asumir nunca este proyecto”. “Era mi primera experiencia en el sector público, porque hasta ahora siempre había trabajado en el ámbito privado. Ahora no sé qué haré, porque en el paro ni siquiera existe la categoría de gestor de I+D o de gestor de proyectos. Se ofrecen muchas iniciativas de formación, pero luego no se ajustan al catálogo de categorías profesionales que se demandan en Empleo. Es algo incongruente”, concluye.[/apunte]

[apunte]FERIA DIVULGATIVA
Mañana lunes finaliza el plazo de presentación de enmiendas a los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma, que se debatirán en el Parlamento regional el próximo día 27. Por este motivo, la Plataforma de Jóvenes Investigadores de las universidades canarias está llevando a cabo distintas acciones con el objetivo de que el Gobierno autonómico aumente la dotación para investigación para 2013. Así, además de una amplia campaña en redes sociales, los investigadores de la ULL realizarán a lo largo del día de hoy una feria divulgativa en la plaza de La Concepción y distintas calles del casco histórico de La Laguna. “El objetivo es concienciar a la población de la importancia que tiene la investigación en Canarias”, explica la bióloga Natalia Rodríguez. Además, otro grupo se puso en contacto la semana pasada con los distintos grupos parlamentarios con representación en la Cámara regional, para convencerles de que eleven enmiendas en las que se dote de mayor financiación a la I+D+i. “Hasta el día 17 existe la opción de presentar enmiendas a los Presupuestos y, aunque tenemos esperanzas, puede pasar cualquier cosa”, concluye la bióloga. [/apunte]