JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife
El trámite parlamentario de convalidación de los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma para el próximo ejercicio, ha puesto de manifiesto las dificultades que están teniendo los grupos políticos para cuadrar unas cuentas marcadas por la austeridad y ajustadas a los requerimientos que imponen el Estado y la Unión Europea.
Así, entre las enmiendas presentadas esta semana hay algunas que pueden tener graves consecuencias para algunos sectores del Archipiélago. Es el caso de los sanitarios que alternan la docencia y el ejercicio profesional en el Servicio Canario de la Salud (el SCS). Según explicaron ayer en rueda de prensa el decano de la Facultad de Medicina de la Universidad de la Laguna (ULL), Emilio Sanz, y la directora de la Escuela de Enfermería y Fisioterapia, Mercedes Novo, Coalición Canaria (CC) y el Partido Socialista (PSOE) han presentado una iniciativa por la cual los profesores vinculados de Medicina y Enfermería que hayan cumplido 65 años “no podrán compaginar su labor con la docencia práctica en los hospitales” del SCS. Ello afectaría, solo en el primer semestre de 2013, a 15 médicos y 4 enfermeros, la mayor parte de ellos profesionales de dilatada experiencia, directores de departamento y jefes de servicio de distintas especialidades.
Para el rector de la ULL, esta medida supone una “agresión innecesaria”, puesto que el grueso de la nómina de estos profesores la abona la propia universidad, y además no ha sido en ningún caso negociada con los centros de educación superior de las Islas, que verían su docencia práctica “seriamente comprometida”. Se da la circunstancia de que la jubilación forzosa en las universidades se produce a los 70 años, con lo cual muchos docentes de Ciencias de la Salud se verían abocados a impartir clases teóricas, pero no prácticas, cuando se trata del colectivo de profesores con mayor experiencia clínica.
En la misma línea se manifestó el decano de Medicina, Emilio Sanz, quien incluso aseguró que la medida que pretende aprobar el Gobierno regional podría ser “ilegal”, ya que la mayoría de los afectados son funcionarios del Ministerio de Educación con plaza vinculada. No en vano, Sanz señaló que varias comunidades autónomas que pretendieron aplicar una norma similar acabaron dando marcha atrás en sus intenciones.
TASA DE REPOSICIÓN MÍNIMA
Por su parte, la directora de la Escuela Universitaria de Enfermería y Fisioterapia, Mercedes Novo, manifestó que no se trata sólo de la jubilación anticipada como personal vinculado, “sino que lo que está en juego es la pérdida de un personal con mucha experiencia clínica” y que resulta “básico” para el funcionamiento de los hospitales universitarios. Novo aclaró que en su sector existe ahora un índice de desempleo nunca visto. “El problema no es que sobren enfermeros, que de hecho siguen faltando, lo que pasa es que no los contratan”. “Si prospera la enmienda el funcionamiento de la escuela y la facultad correrían un grave peligro, porque además la tasa de reposición que permite el Estado es sólo de un 10%, lo que apenas supondría que se cubrieran dos o tres vacantes”, arguyó Mercedes Novo.
A la espera de la resolución definitiva de los Presupuestos de 2013 la próxima semana, el rector Eduardo Doménech reiteró que “la mayor parte del sueldo de estos docentes la abona la universidad, mientras que el Servicio Canario de Salud les da una gratificación por la atención asistencial”, con lo cual “esta medida no se entiende”, porque este coste es mucho menor que contratar a médicos recién licenciados sin experiencia práctica”.
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Y EN EL SCS
Durante la presentación de los Presupuestos de su departamento para el próximo año, la consejera de Sanidad del Gobierno canario, Brígida Mendoza, reconoció que el SCS compensaría el recorte de 20 millones de euros en el capítulo I (personal) con las jubilaciones a los 65 años de muchos profesionales.
Ello, agregó Mendoza, permitiría la contratación de personal y que se desbloqueara la Oferta Pública de Empleo (OPE) en Enfermería, paralizada desde 2007. La medida, sin embargo, puede dejar ahora sin personal docente a la Facultad de Medicina y a la Escuela de Enfermería.
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