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El PSOE pide que el salario mínimo no se distancie más del resto de salarios

EFE | Madrid

El PSOE ha registrado hoy en el Congreso una proposición no de ley para instar al Gobierno a que eleve el salario mínimo interprofesional (SMI) entre un 3 y un 4,5 % en 2013, para que no crezca más la distancia entre su cuantía y la del salario medio y no se perjudique más a quienes menos tienen.

En rueda de prensa, el portavoz de Economía del grupo socialista, Valeriano Gómez, ha destacado que el SMI es mucho más importante de lo que habitualmente se cree y que su relevancia es mayor aún en tiempos de crisis.

Gómez ha recalcado que el esfuerzo necesario para salir de la crisis debe ser “proporcional” y que quienes cuentan con el menor salario no deben perder su poder adquisitivo.

Ha recordado que en las dos últimas legislaturas el salario mínimo experimentó una “gran recuperación” de poder adquisitivo, mientras que el Gobierno que preside Mariano Rajoy decidió congelarlo en 2012 por primera vez en la historia y en 2013 ha optado por otra “práctica congelación”, ya que ha propuesto un aumento del 0,6 %.

Según ha dicho, el Gobierno debe hablar y negociar con los agentes sociales para evitar la “erosión sistemática” del poder adquisitivo del SMI, sobre todo si se compara su evolución con la del IPC.

Gómez ha destacado que el salario mínimo en España “no es especialmente alto” y, como ejemplo, ha señalado que en Francia su cuantía es casi el doble a pesar de que la productividad española es un 80 % de la francesa.

Por su parte, la portavoz socialista de Empleo, Concha Gutiérrez, ha subrayado que la renta disponible de las familias ha caído un 3,1 % según los últimos datos de Contabilidad Nacional, mientras que la renta de las empresas no financieras ha aumentado un 6,4 % y la de las entidades financieras se ha disparado un 90 %.

Al respecto, ha indicado que un aumento en el SMI podría servir para amortiguar la caída de la renta familiar.

Asimismo, ha indicado que es necesario aumentar la cuantía del salario mínimo para que se acerque al 60 % del salario medio, como recoge la Carta Social Europea.

Preguntado por las negociaciones en el seno del Pacto de Toledo, Valeriano Gómez ha sido tajante al afirmar que el único que habla de reformar el sistema de pensiones es el Ejecutivo.

“El Gobierno es quien está planteando como siempre sin concretar, como siempre sin informar, como siempre sin dialogar y como siempre sin consultar”, ha destacado.

Según ha explicado, no existe ninguna negociación con los interlocutores sociales, algo que ha calificado de “especialmente lamentable”.

Dicho esto, ha recordado que en enero de 2013 entra en vigor la reforma de las pensiones, que es fruto del “amplio acuerdo social” alcanzando en febrero de 2011, pues la reforma fue pactada con los agentes sociales.

“Quien quiera contar con el apoyo del PSOE para cambiar los términos de esa ley tendrá que obtener al menos el mismo grado de consenso que obtuvo el PSOE en aquel momento”, ha asegurado al respecto.