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Los trabajadores del SCE se encierran en una de sus oficinas en Santa Cruz de Tenerife

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Imagen del encierro protagonizado por los empleados Servicio Canario de Empleo en Santa Cruz de Tenerife. | SERGIO MÉNDEZ

M.F. / AGENCIAS | Santa Cruz de Tenerife

Unos cien trabajadores del Servicio Canario de Empleo (SCE) se encerraron a primera hora de la tarde de ayer en la oficina que este organismo público tiene en Tome Cano, en Santa Cruz de Tenerife, para protestar por los recortes que ha llevado a cabo el Gobierno de Canarias y el Ejecutivo estatal. Este encierro, que durará toda la noche, se une al resto de actuaciones que los empleados del SCE llevan realizando en todos los centros de Canarias durante los últimos dos meses.

La portavoz del comité de empresa, Margarita Velázquez, explicó que los recortes previstos en los presupuestos de 2013 afectan a entre 300 y 400 trabajadores del Servicio Canario de Empleo que dependen del Plan Integral de Empleo (PIEC), el cual se ha visto reducido en unos 32 millones de euros.

Velázquez detalló que el Ejecutivo canario, “en lugar de echar la culpa al Gobierno de España y a la Unión Europea, debe hacer un esfuerzo para evitar estos despidos y para que haya en el Archipiélago unos servicios públicos de calidad”, pues con estos ajustes “no va a haber dinero ni personal para atender a los ciudadanos”. De hecho, el recorte de personal en algunas de las oficinas que la red del SCE tiene por todas las Islas supondrá “más masificación, más colas y más tiempos de espera”, en una sociedad con el índice de desempleo más elevado. “El empleo es un servicio esencial y prioritario y se hace necesario reforzar la cohesión social en una sociedad que está al borde del colapso social y económico”, denuncian los trabajadores. Velázquez anunció que hoy los comités de empresa del SCE presentarán más de 13.000 firmas en el Parlamento de Canarias exigiendo el aumento de la financiación de las políticas activas de empleo y el mantenimiento del empleo público.

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Los empleados protestan en el exterior de la oficina de empleo. | SERGIO MÉNDEZ

Por su parte, la consejera de Empleo, Industria y Comercio, Margarita Ramos, confirmó ayer que el recorte de las partidas previstas para Canarias en los Presupuestos Generales del Estado tendrá como principal consecuencia la reducción del número de personas a las que se podrá atender a través de las políticas activas que gestiona el Servicio Canario de Empleo. Ramos explicó que el “fortísimo recorte” impuesto a la financiación del Plan Integral de Empleo de Canarias (PIEC) para 2013, que se queda en diez millones de euros frente a los 42 de este año, incidirá, “sin ninguna duda”, en las personas desempleadas, ya que el 71% de ese dinero se invierte directamente en políticas de empleo, de las que en 2012 se han beneficiado en torno a 13.000 personas. Los fondos del plan PIEC han financiado 700.000 euros de un total de dos millones que prevé el programa. Por ello, la consejera insistió en que todos estos datos evidencian las “graves consecuencias” que tendrá sobre las personas desempleadas y sobre los emprendedores el durísimo recorte del PIEC.

“Hemos hablado de casi 2.200 contratos laborales directos y del mantenimiento de empleos, de al menos 1.170 emprendedores y trabajadores autónomos, de unas 9.200 personas que han recibido orientación”, recordó.