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El Ejecutivo sólo asegura la partida para los servicios sociales de Cáritas

   

JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife

A la espera de que los responsables de Cáritas Diocesana de Tenerife confirmen mañana en rueda de prensa las repercusiones de la disminución de las subvenciones regionales que recibía la entidad, desde la Consejería de Políticas Sociales del Ejecutivo autonómico aseguraron ayer que el Gobierno canario ha mantenido la partida nominada de 109.000 euros para los servicios sociales básicos que ofrece Cáritas, como son los albergues y comedores.

El resto de ayudas, como los 15.000 euros que recibía el proyecto Lázaro para enfermos de VIH/sida, o las aportaciones que recibían los programas de atención a inmigrantes e inserción laboral de colectivos en riesgo de exclusión sí han sido eliminadas.

Según explicaron a este periódico desde el departamento que dirige Inés Rojas, los recortes estatales han provocado que la Consejería tenga que priorizar, motivo por el cual se han suprimido para este año todas las ayudas que recibían las ONG. “Las subvenciones contempladas en la Ley de Dependencia, la Prestación Canaria de Inserción y el Plan Concertado de Servicios Sociales se llevan más del 90% del Presupuesto de la Consejería, por lo que no hemos podido mantener todas las ayudas que se concedían a otros colectivos”, subrayaron las mismas fuentes.

Como publicó este periódico ayer, la disminución en las ayudas que recibía Cáritas Diocesana de Tenerife obligará a la organización a cerrar servicios y despedir personal. En concreto, proyectos como Lázaro, dirigido a personas con VIH/sida que no tienen hogar y que viven en situación de vulnerabilidad social, o los centros Ben (Santa Cruz) y San Antonio de Padua (Granadilla), destinados a la acogida y asistencia de inmigrantes y sin techo, son los primeros que se han quedado sin ayudas. De igual modo, los recortes también podrían afectar a los centros de Guajara y María Blanca (Puerto de la Cruz), así como a los servicios Café y Calor, dirigido a indigentes de la capital y Puente Atacaite, para mujeres solas con hijos a cargo; así como a los denominados Fauna I y II, pisos tutelados para mujeres que víctimas de violencia de género. En total, según aseguraron las mismas fuentes, la falta de ingresos provocará los despidos de entre 10 y 15 trabajadores y profesionales encargados de estos proyectos. “El importante recorte presupuestario anunciado por el Gobierno regional sobre los fondos destinados a Cáritas Tenerife pone en serio peligro la continuidad de muchos de nuestros proyectos sociales”, manifestaron el lunes fuentes de la entidad.

[apunte]Sanidad muestra su preocupación
Aunque la Consejería de Sanidad no realiza ninguna económica a los proyectos que en la actualidad lleva a cabo Cáritas Diocesana de Tenerife, sí mostró ayer su “preocupación” por la posible desaparición del programa Lázaro, dirigido a personas con VIH/sida que no tienen hogar y que viven en una situación de vulnerabilidad social. Dicho proyecto lleva más de 17 años prestando servicios de acogida y realizando una intervención biopsicosocial personalizada con el fin de generar el empoderamiento personal, social y laboral de aquellas personas afectadas por el virus, sus familiares y amigos. A través de este programa se llevan acciones tales como cobertura de necesidades básicas, acompañamiento y seguimiento individualizado (psicosocial, sanitario, laboral y familiar), asesoramiento jurídico, actividades de formación y ocio, de sensibilización y coordinación interna y externa, entre otros. La Consejería de Sanidad ha mantenido algunos contactos con su homóloga de Políticas Sociales para intentar mantener un servicio por el que han pasado cientos de personas en las últimas dos décadas. [/apunte]