La policía local de La Laguna detiene a un menor buscado por el juzgado de menores y fugado del centro de interamiento

DIARIO DE AVISOS | Santa Cruz de Tenerife

Integrantes de la Unidad de Servicio de Paisano (USP) de la Policía Local de La Laguna procedieron a la detención de D.P.A., menor, de 16 años de edad, sobre el que pesaba una orden de búsqueda, detención y personación en vigor dictada por el Juzgado de Menores número Dos de Santa Cruz de Tenerife.

El servicio se desarrolló en la calle Heraclio Sánchez, a la altura de la calle Barcelona, el pasado 3 de enero, sobre las 20,00 horas, mientras los miembros de la USP realizaban funciones de vigilancia y control de las zonas comerciales del casco histórico lagunero con motivo de la campaña de Navidad.

El menor, ampliamente conocido por el cuerpo policial, se encontraba fugado del Centro de Medidas Judiciales en que debía cumplir la medida impuesta por el Juez de Menores (Centro de Convivencia Tabaiba), dándose la circunstancia que se trata de un menor inserto en el sistema de protección desde los diez años de edad, aunque el domicilio de su familia radica en el término municipal de La Laguna, concretamente en la zona de la Piterita, de Finca España.

Tras localizarlo, la jueza de menores ordenó su ingreso en el centro de medidas judiciales del que se hallaba fugado así como la confección del oportuno atestado, al propio tiempo que se coordinó que la presentación ante su señoría del menor detenido se realizase por el servicio de la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife adscrito a la Fiscalía de Menores.

Hay que destacar que los policías laguneros adscritos a la USP y los integrantes del servicio de la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife adscritos a la Fiscalía vienen colaborando activamente y en coordinación con los Juzgados de Menores y la Fiscalía de Menores en el control y la localización de los menores en el área metropolitana Santa Cruz-Laguna, tanto de los menores en riesgo o declarados en desamparo (tutelados por la Comunidad Autónoma e ingresados en centros de protección) como de los menores «infractores» que por haber delinquido tienen adoptada alguna medida de seguridad (internamiento, libertad vigilada, asistencia a centro de día, permanencia de fin de semana,…).

Esta positiva colaboración se centra en el intercambio de información, traspaso de diligencias, custodia, detención y traslados a los centros de protección y de reforma así como a la Fiscalía de Menores y a los distintos Juzgados de Instrucción o de Menores.