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Anael: “Hay mucha gente con talento”

   

La lagunera Anael lleva varios años afincada en Madrid. | JAVIER GANIVET

La lagunera Anael lleva varios años afincada en Madrid. | JAVIER GANIVET

ELENA MAGARIÑOS | Santa Cruz

Anael es el ángel que protege a los artistas, de ahí su nombre. Filóloga, comunicadora y, sobre todo, cantante, conocemos a esta lagunera por su paso por el programa La Voz, de Telecinco. Ahora, en su ciudad natal, acude a la entrevista con zapatos de Pisaverde y complementos de su amiga Rosalinde, en cuyo desfile cantó hace unas semanas a la vez que hacía de modelo.

-Lleva en Tenerife cerca de un mes, pero vive en Madrid. ¿Qué le ha hecho volver a la Isla?

“Trabajo también como redactora, y este último mes he estado en Tenerife grabando un programa para Cuatro, y estoy encantada de estar en mi tierra. El programa se llama Un príncipe para Corina y, aunque sale toda la isla, la gran mayoría del programa se ha rodado en La Orotava, así que dentro de nada se verá toda la isla a través de Cuatro, lo cual supone una promoción increíble. Siempre he compaginado la música con la televisión, porque me encantan esos dos mundos. Hice Filología Inglesa y después me fui a Madrid a estudiar Periodismo. Así empecé a hacer prácticas en televisión y me quedé, vivo en Madrid desde entonces. De esto hace unos ocho años, pero a pesar de eso empecé antes en la música que en la televisión. Aunque he intentado hacer las dos cosas, mi vocación y mi profesión es la de cantante, pero como no es un mundo fácil del que vivir he ido compaginándolas. Cuando he podido vivir de una lo he hecho, y cuando he podido vivir de la otra, he vivido de la otra”.

-¿Se hace necesario para los cantantes tener que buscar una alternativa como medio de vida?

“El mundo de la música lleva mucho en crisis, mucho antes de que empezara el crack económico. Lleva pasando por una época muy dura desde hace mucho tiempo, y lo único que podemos hacer es innovar. Ahora mismo es muy difícil que te contraten para un concierto, tanto los ayuntamientos como los empresarios. Ya no hay tanto dinero como para invertirlo en la música. Pero eso no significa que no haya oportunidades, desde luego que las hay. Hay que seguir trabajando, hay que seguir luchando y, sobre todo, haciendo cosas de calidad. Lo que sí creo es que quizá, para que las cosas funcionen, hay que hacerlas mucho mejor que antes para que tengan más repercusión. No creo que la industria del disco físico tenga futuro, ahora mismo se vende en Internet, en plataformas como iTunes, y la gente quiere seguir comprando música. Pero tal vez el disco, tal como lo entendemos, solo lo compren ya aquellos románticos que quieren tenerlo”.

-Entonces, ¿cuál es su proyecto?

“Yo creo que el fin es poder vivir absolutamente de la música. Que me conozca la gente, comercializar toda la música que tengo, poder hacer conciertos. Ese es el máximo al que aspiro. Y que se recupere un poco la economía, no solo por mí, sino por toda esa gente que lo está pasando mal, para que podamos seguir trabajando todos”.

-Con dos profesiones ¿se influyen la una a la otra?

“En mi caso sí que influye. Yo canto mucho en inglés, y al ser filóloga ayuda mucho tanto en la pronunciación como a la hora de componer y entender las letras. Además, estudié mucha literatura y mucha poesía, y eso te hace ser mucho más sensible a la música, a la poesía. El arte siempre llama al arte, y a la hora de componer y de escribir ayuda mucho”.

-Le hemos oído cantar muchas canciones ¿Cómo definiría su estilo musical?

“Mi estilo es, fundamentalmente, música pop, que es muy amplia, tanto, que es difícil de definir. Y en mis letras lo que predomina es el amor, aunque me gusta hablar de todo. Siempre el amor es lo que más inspira, no solo lo que yo he vivido sino lo que vive la gente que me rodea. Las amistades, las cosas que te cuentan, lo que todos vivimos… La letra de una canción siempre es poesía. Además, creo mucho en las letras que mantienen las rimas, que mantienen las composiciones poéticas. Tal vez sea un poco antigua en ese sentido”.

-¿Cómo ve la cultura musical española?

“La cultura musical española está bastante atrasada con respecto a otros países. Si comparamos con el Reino Unido, Holanda, Estados Unidos… estamos todavía muy a la cola. En España todavía lo que se escucha es muy básico. Es muy difícil que entren sonidos nuevos o nuevos estilos. Pueden escucharlos una minoría, y aunque esto implique muchísima gente, todavía sigue siendo minoría con respecto a la población total. Por ejemplo, el soul o el R&B. Escuchas el soul de Amy Winehouse o de Adele, pero a nadie en español cantando soul. Hay muchos estilos que parecen no tener cabida con el castellano, o al menos no al nivel de otros países, donde hay una calidad de composición y una cultura musical con respecto a estos estilos enorme. Tal vez escuchar una canción de R&B en español suene un poco raro la primera vez, la segunda o la tercera, pero el caso es perfilarlo hasta dar con el sonido justo. Tenemos que dar lugar a que suene todo tipo de música. Aún tenemos mucha cultura, sobre todo en la Península, de flamenquito, pop con toque flamenco, y aquí en las islas de reggaeton y sonidos más latinos. Se nota mucho esta diferencia entre la Península y Canarias. Hay muchísima gente con talento por ahí a las que dar oportunidades, y no es tanto culpa del público como de las empresas musicales. Al fin y al cabo, es un negocio. Pero bueno, así es como nació la música indie”.

-No solo es conocida en España, ha hecho muchos conciertos en Finlandia. ¿Cómo llegó allí?

“Mi productor es medio canario y medio sueco. Nos conocimos porque él representó a España en 2007, cuando el festival de Eurovisión se hizo en Helsinki. Así nos conocimos, y acabé haciendo conciertos en Finlandia. Es un público al que le encanta la música en vivo, lo respetan muchísimo. Una persona que se sube a un escenario y es capaz de cantar para ellos tiene muchísimo valor, y te acogen y te aplauden de una manera genial. Pero esto no quiere decir que no haya hecho conciertos en España. A raíz de La Voz hemos hecho muchísimos conciertos, sobre todo en Madrid”.

-¿Qué supuso para usted el paso por el programa?

“Al programa de La Voz me presenté porque no podía dejar pasar la oportunidad y no quería arrepentirme dentro de un tiempo de no hacerlo. Pero soy una persona muy nerviosa, muy sensible a estar expuesta de esa manera. No es lo mismo sacar una canción que exponerte en un programa de televisión. Pero era algo tan bonito que no podía dejarlo pasar. Convocaron a 15.000 personas al casting, hasta que quedamos solo 100 en el casting final, que fue solo a piano. No lo pasé mal porque la verdad es que el equipo de Boomerang creó un ambiente muy bueno, pero donde en un casting suele haber tres o cuatro personas, había unas diez. Había gente de Universal, de Boomerang, de Telecinco… el pianista y yo, cantando canciones como Nothing Compares to You, de Sinead O’Connor, y Si tu no estás aquí, de Rosana. Ese casting se hizo en febrero y no supe nada hasta julio, pensaba que no lo había pasado. El momento en el que me llamaron me pilló caminando por Madrid y pensaba que era broma, no me lo creía. Les dije: ‘Que no, hombre’. Creía que no me iban a coger. Luego, en la audición a ciegas me dijeron que cantara Rolling in the Deep de Adele. En ese momento me quedé muerta, jamás habría escogido esa canción. Adele, la cantante del momento, con esa calidad vocal que tiene y esa canción tan difícil. Pero claro, te dicen ellos qué canción cantar porque al ser tanta gente corres el riesgo de cantar lo mismo que otros. A pesar de todo, fue una de las noches más bonitas de toda mi vida. Pasé unos nervios increíbles. Salí prácticamente sin maquillaje porque antes de salir me hinché a llorar y se me fue todo, pero la sensación de que ellos se giraran, las cosas que me dijeron, el plató tan increíble, la acogida del público… no lo puedo describir con palabras. Sobre todo cuando salí del plató y me recibieron mi cuñada y mi amiga Rebeca. Después, nos fuimos a celebrarlo por Madrid, no nos acostamos hasta las ocho de la mañana, y mientras yo no hacía nada más que pensar ‘Quiero darme cuenta de esto, vivirlo, quiero ser plenamente consciente’. Ya lo que pasara después no me importaba tanto. Lo mejor del paso por el programa fue, sobre todo, mis compañeros. Es gente que llevaba muchísimos años dedicándose a la música, y claro, tienes miles de cosas en común con ellos. Se notaba la conexión”.

-Quieras que no, dedicándose a lo que se dedica siempre está expuesta a opiniones, ¿cómo se lleva esto?

“En el programa muy bien, porque la única persona que te medio aconsejaba era Rosario, pero era una situación muy agradable para los cantantes. Siempre he llevado muy bien el estar de cara a la gente. Si he tenido alguna crítica ha sido constructiva, tal vez si algo se me dijo durante el programa es que estaba muy delgada, y es que como soy tan nerviosa adelgacé muchísimo. Es increíble que la gente te pare por la calle para darte su cariño solo porque te ha visto en el programa. Mi proyecto más próximo es sacar un single. Hasta hace un par de semanas tenía contrato con Universal, pero ahora que se ha acabado lo que quiero es sacar material propio con mis productores”.

-Estamos cerca de Eurovisión, y estuvo a punto de presentarse hace algunos años. ¿Cómo ve el festival?

“A mí el festival me encanta, es magnífico. Tanto para que te conozcan en toda Europa como a nivel de experiencia, porque tienes un año entero de trabajo y promoción. Es una oportunidad genial para los cantantes, que a mi parecer no se toma lo suficientemente en serio en España siendo un festival tan importante como es, y que en el resto de Europa sí que se respeta. Es totalmente diferente en otros países, desde la preselección hasta cómo se vive el festival. Ojalá se recuperara esa ilusión que teníamos hace algunos años con respecto a él”.