El Cabildo de La Gomera ha sufragado 2.140 servicios funerarios en 10 años

El presidente del Cabildo, Casimiro Curbelo, se reunió ayer con las cuatro funerarias locales. | DA

EFE | San Sebastián de La Gomera

El Cabildo de La Gomera ha sufragado un total de 2.140 servicios funerarios en 10 años gracias a la póliza de decesos suscrita por la institución desde 2002.

En un comunicado, el presidente de la corporación insular, Casimiro Curbelo, recuerda que “esta pionera iniciativa es única en todo el territorio nacional” y destaca que ya se ha sacado a licitación la contratación de la póliza para los próximos cuatro años con un presupuesto de 1,2 millones de euros.

“No sólo vamos a mantener la póliza de decesos sino que vamos a mejorar la eficiencia del servicio”, dice Curbelo, quien mantuvo hoy una reunión con representantes de las cuatro empresas funerarias de La Gomera para que “este servicio se pueda mejorar en el marco de la sostenibilidad”.

“Desde La Gomera nos sentimos orgullosos cuando vemos que en otros lugares precintan nichos y no se resuelven problemas de esta naturaleza y aquí ayudamos a los familiares en momentos tan duros”, señala.

Ésta es una política social, añade, que identifica al grupo socialista que gobierna en la isla y que no es sólo para los residentes presentes sino también para los residentes ausentes.

La póliza de decesos garantiza a todos los gomeros la cobertura de los gastos que se ocasionan en caso de fallecimiento, con independencia del lugar en el que se produzca el suceso.

El beneficio se extiende, entre otros, al servicio funerario, vehículos de acompañamiento a los familiares, corona, lápida, asesoramiento, tramitación de registro civil y tributos, y tasas municipales.

Curbelo asegura que desde la corporación insular se pretende que los empresarios de la isla puedan ver compensado su importante esfuerzo en la calidad de la prestación del servicio fúnebre al ciudadano.

“Queremos que quiénes prestan el servicio, que son los empresarios de La Gomera, tengan una compensación económica razonable y que sea mejorable desde el punto de vista de la calidad”, indica.