‘Escrache’ educativo

SARAY ENCINOSO | Santa Cruz de Tenerife

Nuevas formas de protesta para nuevos tiempos. Los cuatro sindicatos que tienen representación en la mesa sectorial de Educación -las entidades Anpe, STEC-IC, Fete-UGT y CC.OO.- acudieron ayer al encuentro con la clara intención de salir con una promesa de negociación debajo del brazo. La cita, que llegaba después de que la Consejería anunciara que iba a convocar oposiciones a pesar del rechazo de todas las organizaciones, fue un fiasco.

Los sindicatos, cansados de no ser escuchados, decidieron a mediodía encerrarse en las dependencias de la Consejería hasta que alguien del equipo directivo les prometiera negociar. Al final, quien respondió a la llamada de los sindicatos fue la viceconsejera regional. Manuela de Armas, que solucionó el encierro prometiendo a los docentes hacer todo lo posible para abrir vías de diálogo sobre el asunto que más preocupa estos días a los docentes: la orden y el decreto que regula el acceso a las listas de empleo. Consideran que muchos interinos y sustitutos perderán sus trabajos si hay oposiciones y las listas se reordenan.

No fue un escrache en el sentido más estricto, pero se le parece: los sindicalistas optaron por quedarse y presionar con el objetivo de que el equipo que lidera José Miguel Pérez cambiase de opinión. La medida no cogió por sorpresa: los docentes llevan semanas exigiendo que la Administración pacte este asunto antes de que se convoquen oposiciones. Sin embargo, la semana pasada la Dirección General de Personal anunció la convocatoria. En concreto, la Consejería planteó ayer la distribución de plazas por especialidades: Inglés: 59; Francés: 40; Audición y Lenguaje: 24; e Inspección: 15. Los exámenes empezarán el 21 de junio.

El STEC-IC es, por ahora, el sindicato que ha ido más lejos con su enfado y ayer presentó un preaviso de huelga para el 19 de abril. Nadie (los sindicatos) quiere oposiciones, pero menos con el sistema actual.