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Óleos de Antonio L. Portero en la Casa Elder – Por Joaquín Castro

Desde el pasado día 10, quedó inaugurada la exposición de óleos y dibujos de Antonio L. Portero, que desde Guadalajara nos trae a Tenerife su nueva colección; estudios de bodegones con su importante hiperrealismo, así como sus excelentes dibujos, haciendo gala de su preparación académica.

Este pintor lo deja todo a un lado y va al encuentro de problemas y dificultades, y también de soluciones, siempre acertadas. Es por ello que sus bodegones son de perfecta realización, le bastan unos frutos para componerlos. Juega con luces y sombras, con reflejos y brillos, con las transparencias o con los objetos cotidianos del día a día. Su perfección es descriptiva, domina el color como quiere, con los fondos, la armoniosa sincronía con el dibujo, junto también con los elementos que elige para componer.

Obras las de Portero de un realismo brillante y cautivador, exquisito, elegante, que impresionan totalmente, en contraste con los trabajos más de estudio. Exhibe sus bodegones con sobriedad y buen gusto. Su temática es muy variada, pero creo que lo que más le place es el bodegón, sin renunciar a otras ideas, como el retrato o el desnudo femenino. Hay en su trabajo una estructuración firme, recia, que dulcifica y poetiza con el color, ofreciéndonos siempre la realidad. Los elementos de sus bodegones, de una variedad total, hacen que sus cuadros sean un canto a la intimidad.

Portero es un artista formado en la escuela andaluza de pintura. Pensar y hacer son para él dos momentos del mismo tiempo, personalidad e ilusión. Su virtuosismo consiste en el dominio de la técnica, que materialmente atrapa la luz en sus bodegones, llenos de efectos mágicos mezclados con elementos donde abundan las transparencias. De este modo consigue atmósferas que hacen sentirnos realmente privilegiados al contemplar la belleza que confiere a sus cuadros, con aire propio más allá de lo puramente imitativo.

Bodegones y dibujos, generalmente de desnudos, en los que pone de manifiesto su pintura, resultado de teorías que convierte en hechos plásticos; sus telas están meditadas, pensadas, y se nos ofrecen estructuradas, con rotundidad en las formas; le interesan las luces y juegos de sombras, y pasa todo ello a través del color que a veces establece separaciones y en otras se convierte en atmósfera unitaria. Pintura que despierta sentidos y estimula pensamientos.

Portero es un pintor dedicado cien por cien al arte. Su vida transcurre creando en el día a día. El realismo es su oriente, un realismo pasado por su viva paleta. Sabe crear una obra rica en tonos, densa en atmósferas, atrayente.

Artista de factura ligera y concisa, donde el instante es decisivo, toda su obra parece estar pintada de una sola mirada, como si la atmósfera fuera elemento singular.

Ha realizado innumerables exposiciones individuales en Madrid, Barcelona, Sevilla, Tenerife… y siempre fiel al camino pictórico que ha querido seguir.