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La playa de Las Gaviotas se reabre al público

   

obras playa de las Gaviotas

Arteaga antendía a los medios de comunicación a pie de talud. / F.P.

NATALIA TORRES | Santa Cruz de Tenerife

Santa Cruz vuelve a contar desde ayer con la playa de Las Gaviotas entre sus zonas de baño autorizadas. Después de permanecer más de dos años cerrada por el riesgo de desprendimientos, finalmente la obra encargada por el Ayuntamiento ha permitido que al menos el 70% de su superficie esté disponible para los usuarios.

Ayer por la tarde, quienes así lo desearan ya podían acercarse hasta la playa para disfrutar de nuevo de esta parte del litoral aunque, como advirtió el concejal de Obras y Servicios, Dámaso Arteaga, se espera “que la gente respete la señalización y que solo use las partes que están autorizadas para el baño”.

El edil detalló que esta parte de la playa “está señalizada y delimitada para informar y advertir qué área se habilita como espacio útil de playa”. “Por ello, recomendamos un estricto cumplimiento de las indicaciones que recoge la señalización instalada en la zona, ya que la policía local tiene previsto sancionar a cualquier persona que contravenga la normativa que se ha expresado al respecto”.

Arteaga, señala que el Ayuntamiento “ha logrado que los usuarios puedan disfrutar nuevamente del baño en este espacio de Anaga antes de la fecha prevista, puesto que su reapertura se adelanta al comienzo del puente del Día de Canarias, con el fin de que pueda ser aprovechada por quienes lo deseen durante estas jornadas festivas”.

Coste del arreglo

El coste de los trabajos realizados en Las Gaviotas asciende a 121.658,54 euros, financiados en exclusiva por el Consistorio capitalino, a los que hay que unir los 10.000 euros necesarios para la mejora, el acondicionamiento y la limpieza de las zonas colindantes y accesos.

La tarea desempeñada ha consistido en la instalación de distintos elementos de contención, guiado y protección que impedirán, en el futuro, que nuevos elementos del talud montañoso puedan llegar hasta la arena en caso de que ocurran desprendimientos. Una vez que se ha saneado la ladera, se procedió a la retirada de todos aquellos materiales de menor tamaño que se encontraban sueltos antes de consolidar el talud con distintas soluciones técnicas.

La parte que aún queda por asegurar no cuenta con financiación la cual podría superar el millón de euros debido a que se trata de un sistema de sujeción distinto y más enfocado a rocas de gran tamaño que son las que pueden caer en la parte de la playa que seguirá cerrada.