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Nuestras pensiones están en juego – Por Rafa Lutzardo

Las pensiones en nuestro país están en juego. En las manos de 12 expertos escogidos por el Gobierno central, con el objetivo de elaborar un estudio que sirva de guía para la reforma de pensiones. El informe consiste en dos alternativas: un Factor de Equidad intergeneracional (FEI), que modera el cálculo de la pensión inicial por el aumento de la esperanza de vida, y un Factor de Revalorización Anual (FRA), que vincula el crecimiento anual de las pensiones del OPC y lo liga a los ingresos públicos.

Lo que esta claro es que todo tiende a privatizarse. Es decir, el que pueda, tendrá que acogerse a un plan de pensiones privado. Y el que no, tendrá que conformarse con una paga miserable de la Seguridad Social. España está cambiando, y lo hace a través del sufrimiento y dolor de muchas personas. Los jubilados (mayores) y los que no lo están aún (jóvenes), viven un clima de incertidumbre. Las pensiones no se habían tocado nunca. Eran sagradas, pero los vecinos de Europa le exigen y presionan para que España profane las pensiones de nuestros abuelos, padres y, de paso, jugar con el futuro de millones de jóvenes que aún no tienen empleo.

Según pública El País, el mandato del equipo está formado por 11 hombres y una mujer, cuyo objetivo es plantear un “factor de sostenibilidad”, que es el mecanismo automático por el que las pensiones se ajustan a la esperanza de vida y otras variables demográficas y económicas. Es un duro reto para España: la esperanza de vida a partir de los 65 años crece alrededor de 16 meses cada 10 años, según estos estudios, y las necesidades en 2050 podrían ser un 70% superiores a las actuales. La nueva cultura económica en Europa ya comenzó su andadura. España lo está haciendo de una manera agilizada y brutal. Aunque Mariano Rajoy diga que ya lo peo ha pasado, se prevé que para final del presente año, España terminará con una cifra de siete millones de parados. Los mayores están asustados, pues no en vano creen que le rebajaran sus míseras pensiones, tras cotizar más de 30 o 40 años de vida laboral. Así pues, el futuro de nuestros abuelos, padres e hijos está en las manos de un grupo de sabios para que definan cuál será el mejor modelo y así aplicar el llamado factor de sostenibilidad, la fórmula con la que se calcularán las pensiones futuras. ¿Cuál será el futuro de nuestras pensiones?