¡Chas virÃa! Que no pase con el tren de Santiago lo del Spanair o el metro
En apenas 48 horas abundan las interesadas informaciones de todo tipo cuyo denominador común es presentar al maquinista como un loco irresponsable. El objetivo, evidente, es crear una poderosa corriente de opinión para responsabilizarle de la terrible tragedia que ha costado tantas vidas en Santiago. Se va pergeñando asà el esquema que ya funcionó con el accidente del Spanair en Barajas o con el del Metro de Valencia, ambos cerrados claramente en falso para mayor escarnio de las vÃctimas y alivio de intereses tan poderosos como deleznables. Ahora que se ha levantado la venda que velaba el caso de Valencia y a la espera de que algo similar ocurra con el de Madrid, simplemente desear que esta nueva catástrofe no tenga que esperar tanto tiempo para que se haga justicia sobre el mismo.
¡Lo mejor! Griñán toma la mejor decisión porque beneficia a AndalucÃa
Más allá de si tendrá que rendir cuentas o no por el escándalo de los expedientes de regulación de empleo (ERE), José Antonio Griñán acierta al dimitir como presidente de la Junta de AndalucÃa. Ni él ni nadie es imprescindible y a la polÃtica va uno a servir, que no a servirse. Es obvio que Griñán no puede explicar cómo no vigiló lo suficiente para evitar un fraude de semejantes dimensiones, asà que su dimisión se ajusta a un comportamiento tan cÃvico como democrático. Qué diferencia con la de la cúpula del Partido Popular, que pasea sin vergüenza el desdoro de sus mentiras a cuentas de Luis Bárcenas, al que hasta pagaban los abogados mientras guardó silencio y ahora demonizan como el criminal (presunto) que en realidad es. Si Bárcenas y Diego Torres -el otro chantajista que amenaza la estabilidad de nuestras instituciones- son alguien, es por los chantajeados. No lo duden.