Secuencia completa del accidente de la Gala del Carnaval de Tenerife 2013

TINERFE FUMERO | Santa Cruz de Tenerife

Catorce segundos desde que una enorme llamarada alcanza por detrás a la fantasía de Saida Prieto hasta que uno de los bomberos del Consorcio Insular aplica uno de sus extintores para poner coto al infierno que amenaza la vida de la joven, de 25 años de edad y que aún permanece convaleciente de las gravísimas quemaduras.

Así se puede observar con nitidez en las imágenes captadas por las cámaras de seguridad del Recinto Ferial, que albergó esta fatídica Gala del Carnaval santacrucero el pasado 6 de febrero, y a las que ha tenido acceso este periódico después de que el Juzgado de Instrucción número 1 de la capital tinerfeña determinase que el visionado de su contenido no vulnera derecho a la intimidad alguno.

Y de la secuencia también se certifican otros aspectos de los sucedido: Saida es evacuada del lugar de los hechos cuatro minutos después de que su traje se viera alcanzado por una lengua de fuego que, en dos segundos, se tornó en una gran llamarada alimentada por plumas del traje.

Nada más empezar a arder, la joven (una antorcha humana ya) da unos pasos vacilantes hacia delante y hacia su izquierda, mientras se atisba parcialmente (la cámara está detrás de la fantasía) cómo por delante luchan para liberarla de su trampa mortal a pesar de que las llamas les alcanzan. No en balde, otras cuatro personas sufrieron quemaduras: los dos diseñadores de Saida (Carolina y Víctor), un técnico de sonido (Leopoldo) y el diseñador del traje del que surgió el fuego y ahora imputado por esta causa, Willy Jorge.

La actuación de dos bomberos con extintores llega a los 14 segundos, que son menos incluso si se cuenta a partir de la primera gran llamarada. También aparece un miembro de Protección Civil que sin duda da la primera voz de alarma ya que está hablando por el teléfono móvil cuando no ha pasado ni medio minuto del suceso.

Luego vienen unos minutos de trasiego en el lugar hasta que, entre varias personas, trasladan a Saida hacia la ambulancia de la Cruz Roja. Inmediatamente quitan lo que resta de su traje y, cinco minutos después de desatarse el infierno en la rampa que da al escenario, trabajadoras de la limpieza pasan la mopa y dejan el lugar despejado para que pase la siguiente candidata.