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Gloria Gutiérrez está a un paso de renunciar al cargo en el Gobierno

   

DOMINGO NEGRÍN MORENO | Santa Cruz de Tenerife

El PSOE vive días de gloria. Por fin se está cumpliendo el principio de incompatibilidad en el partido, aun a regañadientes y con matices. Tras la marcha forzada de Pedro Martín, la vacante del alcalde de Guía de Isora en el Parlamento será ocupada por Gloria Gutiérrez.

Muy a su pesar, la actual directora general de Trabajo abandonará el cargo en el segundo nivel del Gobierno por recomendación de Francisco Hernández Spínola. Ella es la siguiente en la lista de las elecciones de 2011, después del propio consejero de Presidencia, Justicia e Igualdad, del mismo Pedro Martín y de Dolores Padrón.

Si Gutiérrez optara por continuar en el despacho de la consejería que dirige Paquita Luengo, en el Legislativo entraría Guillermo de la Barreda. Y eso sería como poner una chincheta en el escaño de Spínola. La incorporación de ese representante del sector mayoritario de la agrupación local de La Laguna no es del agrado del cabeza de cartel de los socialistas de Tenerife en los últimos comicios autonómicos, que discrepa de la línea oficialista en el ámbito municipal.

Secretario insular de Sanidad, Guillermo de la Barreda ha sido jefe de traumatología del Hospital Universitario de Canarias. Se jubiló hace unos meses. Ha ejercido, asimismo, labores de sindicalista, primero en UGT y posteriormente en Intersinical Canaria. En la campaña electoral, De la Barreda censuró los “reiterados engaños” por parte de Coalición Canaria en relación a los centros sociosanitarios del Norte y del Sur. “Solo lo llaman hospitales cuando se aproximan las elecciones”, se quejaba Aurelio Abreu en los mítines junto a Guillermo de la Barreda.

“Se demuestra hasta qué punto manipulan incluso el lenguaje para justificar un retraso que no puede tolerarse más, porque juega con algo tan sensible como la salud y la atención médica de las personas”, denunciaba el ahora vicepresidente primero del Cabildo y consejero de Bienestar, Sanidad y Dependencia en el equipo de gobierno que el PSOE comparte con CC. ¡Quién lo diría! Son las circunstancias personales de las que hablaba el pensador Ortega y Gasset. Es lo que hay. Lo tomas o lo dejas. Él renunció al Senado, Cámara a la que regresa José Vicente González, y Ana Lupe Mora entregó el acta de concejal en el Ayuntamiento de El Rosario.

Quien no se da por aludido es Hernández Spínola, que se agarra a la tabla de salvación de los estatutos. El vicesecretario general regional interpreta que no está escrito que deba soltar lastre, porque lo suyo es diferente. Aunque lleve razón, no se trata de un clamor en el partido. Más clara es la situación del secretario general del PSOE canario, José Miguel Pérez, pues la responsabilidad de vicepresidente del Ejecutivo va unida a la condición de diputado.

El presidente del Cabildo de El Hierro, Alpidio Armas, tampoco se apunta de voluntario.

Estos movimientos se producen sobre el escenario de la conferencia política de noviembre.