¿Y por qué no? – Por María Fresno

A la hora de adentrarse en un proyecto empresarial uno tiene dos opciones: justificar que no hace esto o lo otro porque el problema es este o aquel; o bien preguntarse ¿y por qué no? Este planteamiento empresarial, que perfectamente se podría trasladar a la vida cotidiana, pertenece al consultor Enrique Lucini, cuyo optimismo es absolutamente contagiable. Puedo entender que hay determinadas circunstancias en las que por mucho que uno busque y busque no encuentra los brotes verdes ni por asomo, pero si todas las previsiones se van cumpliendo y si las cifras confirman el crecimiento, ¿por qué ese empecinamiento en ver el árbol en mitad del camino? Las expectativas empresariales van mejorando [incluso por encima de sus propias previsiones]. El comercio, principal indicador del bolsillo ciudadano, mejora como no lo ha hecho en los últimos seis años. Las contrataciones en el sector para esta campaña de Navidad aumentarán el 5% y el turismo, el pilar de la economía canaria, cerrará 2013 dándonos una nueva alegría con cifra récord de visitantes. Hay quien, como yo, puede ver en estos datos síntomas de una ligera recuperación económica y, si bien es absolutamente imposible que volvamos a los años anteriores a 2007, por lo menos respiramos por nosotros mismos. Falta mucho por hacer, entre otras cosas que los bancos comiencen a abrir el crédito a empresas y familias, pero ya no necesitamos mascarilla. Hay otros que, por el contrario y a pesar de los datos, pueden seguir poniendo peros y decir que el consumo crece porque es Navidad, que el turismo se incrementa por la situación de Oriente Medio o que el empleo aumenta, pero con unos salarios bajísimos. Hay de todo. Hasta políticos que quieren poner una tasa al único sector que nos sustenta (el turismo), no sé muy bien con qué objetivo, pero desde luego no con el de aumentar los ingresos. El debate de la tasa turística es viejo. Ya se abordó hace años y quedó demostrado que para lo único que sirve es para dañar al sector. Nueva Canarias ha llevado, de la mano de los sindicatos, esta propuesta al Parlamento regional, donde espero que no salga. Baleares la implantó y tuvo que eliminarla porque descendió el turismo. Canarias no es comparable a Cataluña, donde el turismo es urbano. A las Islas vienen turistas con precios muy ajustados donde un par de euros más puede hacerles cambiar el destino. No logro entender a los que ven el vaso siempre lleno, pero tampoco a los que lo llenan para que rebose.

@MariaFresno72

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