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La familia fallecida por intoxicación, en paro y con la casa embargada

   

Agencias | Sevilla

El matrimonio fallecido este sábado por una intoxicación alimentaria en Alcalá de Guadaíra (Sevilla) se levantaba cada día a las siete de la mañana y salía a las calles para, con la ayuda de una pequeña furgoneta, recoger cartones, cajas de plástico y ropa vieja para obtener algún dinero con su venta. Esa actividad la mantenían hasta última hora de la tarde y también algunos sábados por la mañana, según los testimonios de sus vecinos recogidos por Efe y publicados en distintos medios. El matrimonio, una de cuyas hijas, de 14 años, también murió, y la otra, de 13, permanece ingresada, también aceptaba donaciones de establecimientos comerciales que les proporcionaban alimentos caducados o a punto de caducar.

Según indicaron ayer desde el centro sanitario sevillano, la menor permanece ingresada en la unidad de cuidados intensivos (UCI) si bien “evoluciona favorablemente” y “previsiblemente” pasaría a planta en el día de ayer. El hombre, E.C., de 61 años, y su mujer, C.B., de 50, no eran demandantes habituales de los servicios sociales municipales, a los que sí habían recurrido en alguna ocasión, según explicó a Efe la delegada municipal de Asuntos Sociales, Mariló Gutiérrez, ni tampoco percibían ayuda de Cáritas desde hace algo más de dos años, lo que también hacían de forma no habitual.