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Unos 150 vecinos reclaman ante la sede de Aqualia un agua de calidad

   
Los ciudadanos reclamaban la presencia del alcalde, Marcos Brito, y lo desafiaban a beber el agua de mala calidad que reciben en sus viviendas. / DA

Los ciudadanos reclamaban la presencia del alcalde, Marcos Brito, y lo desafiaban a beber el agua de mala calidad que reciben en sus viviendas. / DA

GABRIELA GULSSERIAN | Puerto de la Cruz

Cansados de cuatro restricciones en dos años en el servicio público de agua, unos 150 vecinos de Las Dehesas, La Vera, Las Águilas, San Antonio-Esquilón, Las Arenas, San Fernando y Taoro-Malpaís, los barrios afectados en Puerto de la Cruz, reclamaron ayer ante la sede de Aqualia, responsable del suministro, un agua de calidad. “Braulio, escucha, el pueblo está en la lucha”, le gritaban al jefe de servicio en la ciudad, Braulio Domínguez. También desafiaban al alcalde, Marcos Brito, “a ver si se bebe el agua”, y pedían “que la empresa les pague todo lo que les debe”.

No quieren saber de fechas, plazos ni nada que se le parezca. Solo reclaman que se solucione un problema que lleva ya dos años en Puerto de la Cruz, pero que desde hace 29 días le impide a 14.000 personas hacer su vida con normalidad, porque no pueden tomar agua del grifo, ni utilizarla para preparar alimentos y hay casos de personas que ni siquiera se duchan porque han tenido problemas en la piel.

Muchos vecinos llevaron pruebas de la mala calidad del agua que reciben en sus viviendas, como botellas con el líquido elemento, ropa blanca manchada con tierra, filtros tupidos y partes médicos que demuestran las afecciones en la piel incluso en menores de edad.

Los ciudadanos también se quejaron de que durante todo este tiempo la empresa “no ha hecho absolutamente nada” para solucionar el problema “y ahora quiere pagar los filtros con dinero público”. Además, mostraron su indignación por un aumento en la factura, “pese a que llevan 29 días sin prácticamente utilizar agua del grifo” y comprando garrafas de agua.

En este sentido, desde la plataforma Afectados por Aqualia se les recomendó presentar una reclamación de forma individual para que puedan ser indemnizados, registrándose, solo en el día de ayer, 62 escritos. Hay quienes decidieron hacerlo a través de la plataforma virtual Change.org, como es el caso de Loli Amador, que ya ha conseguido 10 firmas sumadas a las 600 en papel que recogió ella misma.

Instancia a FACUA

El portavoz de la citada plataforma, Vicente Romero, informó que había presentado un procedimiento administrativo a través de la Asociación de Consumidores y Usuarios en Acción (FACUA), quien había instado al Ayuntamiento de Puerto de la Cruz a intervenir el suministro de agua realizado por Aqualia, rescindir la concesión y sancionar a la empresa con calificación de “muy grave” con una cuantía que podría oscilar entre los 60.000 y 500.000 euros.

Braulio Domínguez recibió a los integrantes de este colectivo y a los representantes de las asociaciones de vecinos para detallarles las características técnicas del sistema de filtración que se instalará en el depósito de Mar Dulce y las fechas de ejecución que maneja la empresa, a saber, cuatro meses.

Durante el encuentro, que ambas partes calificaron de “cordial”, reiteró que los 12 bidones instalados en los barrios afectados no van a ser sustituidos por camiones cisterna, tal y como pedían los vecinos porque proporcionan mejores condiciones de higiene. Sin embargo, Domínguez explicó que este sistema alternativo estaba disponible las 24 horas mientras que el camión limita el suministro si la persona no está en su vivienda.

El jefe de servicio también se reunió con los medios de comunicación por primera vez desde que se inició el conflicto. Aseguró que la solución más inmediata para resolver el problema del agua pasa por los turbidímetros, que quedarán instalados hoy. Estos dispositivos permitirían medir la turbidez de los depósitos las 24 horas del día, una medida con la que Aqualia garantiza que se cumplan los parámetros sanitarios establecidos. Si se vuelve a pasar el límite, se comunicará a la autoridad sanitaria y se establecerá el protocolo correspondiente.