Carta para Sor Lucía – Por Juan Henríquez

Mi apreciada y desconocida Sor Lucía: Supongo que tras la entrevista concedida a la Sexta TV, el pasado sábado 5 de abril, habrá usted recibido cientos de millares de cartas felicitándola y apoyándola en las respuestas dadas a las preguntas del presentador. Sin embargo, la mía, que la hago pública, tiene una especial diferencia, dado que no es muy frecuente que un ateo se dirija a una monja para reconocerle que tiene un par de ovarios rudos cómo rocas, y que acostumbrados a escuchar los demonios en bocas de curas, obispos y cardenales, oírla arremeter sin piedad contra la clase política, bancos y monopolios, ha introducido usted un nuevo aire fresco en la curia romana. La valentía con la que se dirigió a Rajoy: “Bájate de la mayoría absoluta. La gente está harta. Escucha el clamor del pueblo, millones no pueden vivir con dignidad. Trabajo ya”. O aquella otra para referirse a las palabras del ministro de Hacienda contra el informe de Cáritas: “Montoro, dimisión Ya. Insultantes declaraciones de un aliado de la estafa y mentira del Estado. Cáritas no miente”. Y no les cuento el momento, cuando con la sonrisa en la boca, habló del alboroto organizado por la Esperanza Aguirre con la multa y demás: “Cuando me enteré de ello puse un tuit que decía, al PP le queda una Esperanza y se ha fugado. No me sorprende que esta mujer haya hecho esto porque ha manifestado siempre mucha prepotencia. Ella está por encima del bien y del mal”. A Rouco Varela lo puso cómo a un zapato, “que pertenecía a la Iglesia del pasado”, dijo. No tuvo pelos en la lengua para hablar del divorcio, del aborto, de las parejas entre el mismo sexo, etcétera. Y retomó su particular visión del Gobierno rajoniano: “No escuchan, cada día son nuevas manifestaciones de prepotencia”.

“Montoro nos ha escupido la mano, pero también ha escupido a la cara de la gente”. Total, que ahora entiendo por qué Sor Lucía dice que la conocen por la “monja cojonera o revolucionaria”. Pues desde hoy no está sola: ¡cuenta conmigo!