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Díaz-Flores: “Prevenir el dengue es un reto muy superior al del ébola”

   
En primer término, Basilio Valladares; tras él, José Díaz-Flores y Domingo Núñez. / SERGIO MÉNDEZ

En primer término, Basilio Valladares; tras él, José Díaz-Flores y Domingo Núñez. / SERGIO MÉNDEZ

TINERFE FUMERO | Santa Cruz de Tenerife

Canarias está preparada para reaccionar adecuadamente desde la perspectiva sanitaria a la llegada a las Islas de un enfermo con ébola, un virus que hoy causa estragos en varios países del África Occidental debido a su altísima mortalidad, cifrada en un 70%. Ayer mismo, la Organización Mundial de la Salud estimó que el brote es muy “significativo” y presenta muchos “desafíos”, a la par que admite que la situación podría prolongarse todavía de dos a cuatro meses.

Así lo asegura el director general de Salud Pública del Ejecutivo autonómico, José Díaz-Flores, quien detalló que ya existe un protocolo actualizado para este tipo de casos. Se trata del previsto para las fiebres hemorrágicas y, detalla el alto cargo, “es el adecuado para este problema, por cuanto incluye zonas de aislamiento en los hospitales de referencia [Hospital Universitario de Canarias, Nuestra Señora de Candelaria y Doctor Negrín] y, gracias al Instituto de Enfermedades Tropicales, en apenas doce horas se puede certificar si realmente se trata de un caso de ébola o no”.
“Es mucho más sencillo para nosotros dar respuesta a la llegada de un enfermo de ébola que prevenir la propagación del dengue a Canarias, dado que en el primer caso se contagia a través de fluidos, siempre entre humanos, mientras que en el segundo tenemos que vigilar la entrada del mosquito que lo propaga para así poder evitarla y erradicarla”, afirma Díaz-Flores
Díaz-Flores realizó estas declaraciones tras celebrar una rueda de prensa junto al director del referido Instituto, Basilio Valladares, y el jefe de Epidemiología, Domingo Núñez, cuyo principal objetivo era presentar unas jornadas sobre vigilancia y control del Aedes aegypti (transmisor del dengue) y otros vectores que tendrán como título Pequeñas picaduras, grandes amenazas, justo el lema elegido por la OMS para la reciente celebración del Día Mundial de la Salud.

Los objetivos de dichas jornadas pasan por conocer los brotes de Dengue ocurridos en los archipiélagos de Madeira y Cabo Verde y las medidas de control aplicadas en los mismos, conocer los resultados de las actividades de la vigilancia entomológica que se han realizado en España y en Canarias, y finalmente, establecer las bases para disponer de un Plan de Respuesta ante la detección de vectores transmisores. Dicho plan de respuesta servirá de guía para el resto del territorio nacional. Cabe recordar que la falta de coordinación entre administraciones facilitó la colonización del mosquito Tigre desde Cataluña a Murcia.

En cuanto a los controles preventivos que se realizan en puertos y aeropuertos, estos especialistas confirmaron que también se llevarán a cabo en la Isla de Lanzarote.

Los puertos de Tenerife y Las Palmas, vigilantes

José Luis Cámara
Santa Cruz de Tenerife
Pese a que el riesgo de que aparezcan casos de ébola en Canarias es “mínimo”, Sanidad Exterior -organismo dependiente del Gobierno central- está en permanente contacto con el Servicio de Vigilancia Epidemiológica de para poner en marcha, si fuera preciso, los procedimientos necesarios para la detección precoz de posibles afectados por el virus, con el fin de “minimizar cualquier riesgo de transmisión”. En este sentido, se han dado las instrucciones necesarias para que a cualquier buque o aeronave que pueda llegar a las Islas procedente de países en riesgo se le exija la Declaración Marítima de Sanidad o la Declaración General de Aeronaves. En el caso concreto del Archipiélago, el riesgo provendría de los cargueros con recursos mineros procedentes de África Occidental, que arriban a los puertos de Las Palmas y Santa Cruz de Tenerife.

En estos casos, se aplica el Reglamento Sanitario Internacional (RSI), que obliga a todos los barcos a notificar cualquier problema de salud que se haya podido detectar a bordo. El RSI tiene por finalidad prevenir la propagación internacional de las enfermedades, limitando al mismo tiempo las restricciones innecesarias a la libre circulación de los viajeros. Durante una emergencia de salud pública de importancia internacional o en relación con determinados riesgos para la salud pública, se pueden recomendar medidas que afectarán a los viajes, con objeto de evitar la propagación internacional de una enfermedad.

De igual modo, en el caso de los canarios que trabajan y residen en zonas afectadas, España ha distribuido una serie de recomendaciones a través de las embajadas y consulados sobre los riesgos y las medidas prevención, dado que el ébola es un virus que se transmite por el contacto con personas “claramente enfermas”. Está localizado fundamentalmente en zonas rurales de alto riesgo de defunción para quien lo padece, pero no es de fácil transmisión, solamente se contagia cuando se entra en contacto con fluidos de una persona enferma, con síntomas claros, pues no se transmite durante la incubación. Pese a todo y por la gravedad que podría representar que alguien se infectase hipotéticamente, España está preparada para hacer frente a problemas de este tipo, y siempre en coordinación con el resto de la Unión Europea.